Reino Unido subirá la jubilación a los 68 a mediados de la década de 2030

Actualizado: jueves, 5 diciembre 2013 14:42

Osborne afirma que el trabajo realizado "está dando sus frutos", pero que aún quedan cosas por hacer

LONDRES, 5 Dic. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Finanzas, George Osborne, ha asegurado que el "duro trabajo" realizado por el pueblo británico y el plan económico del Gobierno están "dando sus frutos", aunque anunció que el Ejecutivo seguirá adoptando "decisiones difíciles", como un aumento de la edad de jubilación en el medio plazo o nuevos recortes en el gasto social.

En la presentación del Parlamento Británico de su informe de otoño, Osborne, informó de que, basándose en las cifras de esperanza de vida, tal y como recoge la legislación británica, la edad de jubilación para acceder a una pensión pública se elevará hasta los 68 años a mediados de la década de 2030 y a 69 a finales de la década de 2040.

En la presentación del Parlamento Británico de su informe de otoño, Osborne destacó que las nuevas previsiones económicas confirman que las medidas adoptadas por el Ejecutivo "están funcionando", aunque advierte de que aún no se ha hecho todo el trabajo necesario para asegurar una mejor situación económica en el largo plazo.

"Buscamos una recuperación responsable. Una en la que no malgastemos los logros que hemos alcanzado, pero en la que vamos a tomar decisiones difíciles. Una en el que no repitamos los errores del pasado y en la que preveamos las burbujas de la deuda antes de que amenacen la estabilidad financiera", aseguró.

En concreto, destacó que, aunque está bajando, el déficit sigue siendo demasiado elevado y exige la adopción de más medidas difíciles, así como que, pese a unas mejores previsiones de crecimiento, la productividad es aún demasiado baja y requiere más reformas económicas.

Asimismo, incidió en que hay que hacer frente a los elevados impuestos a las empresas y a las bajas exportaciones, y remarcó que, aunque los ingresos disponibles de los hogares están aumentado, aún se sienten los efectos de la crisis financieras en sus presupuestos y el coste de vida.

RECORTE DEL GASTO SOCIAL.

En este contexto, Osborne anunció que el próximo año volverá a reducirse la partida pública destinada al gasto social, aunque aseguró que este recorte no afectará a las pensiones públicas básicas, así como tampoco a la mayoría de los subsidios de las personas que buscan un empleo.

Por el contrario, esta reducción sí afectará al resto de beneficios fiscales, como la gran mayoría de las ayudas a la vivienda o los créditos fiscales de ayudas a la renta.

Además, el Gobierno reducirá en 3.000 millones de libras (3.610 millones de euros) el gasto de las administraciones públicas en los próximos tres años, aunque no afectará ni a la Sanidad ni a las escuelas.

Por otra lado, informó que basándose en las cifras de esperanza de vida, tal y como recoge la legislación británica, la edad de jubilación para acceder a una pensión pública se elevará hasta los 68 años a mediados de la década de 2030 y a 69 a finales de la década de 2040.