Actualizado 23/06/2008 17:10

Fuerzas de Seguridad descartan que la avalancha sobre el paso fronterizo de Melilla se convierta en práctica habitual

Destacan la colaboración de Marruecos en el asalto de anoche y dicen que el primer intento pudo deberse a "una relajación puntual"

MADRID/MELILLA, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los expertos de Policía y Guardia Civil en la lucha contra la inmigración ilegal descartan que avalanchas sobre la frontera de Beni Enzar, en Melilla, como las dos ocurridas en las últimas 48 horas por parte de grupos de subsaharianos, se vayan a repetir hasta convertirse en un nuevo método para alcanzar territorio español.

Las fuentes consultadas por Europa Press apuntan a "una relajación puntual" de las Fuerzas de Seguridad marroquíes durante el primer asalto de inmigrantes, subsanada en la madrugada de ayer cuando otro grupo intentó utilizar el mismo método para cruzar la frontera. En esta segunda ocasión, Marruecos alertó a las autoridades españolas de la avalancha, lo que permitió cerrar la verja a tiempo y que los gendarmes marroquíes detuviesen a 28 subsaharianos.

Agentes destacados en la zona destacan el buen clima de cooperación que se vive en la actualidad con las autoridades marroquíes, una vez superada la crisis de asaltos a las vallas de Ceuta y Melilla de 2005, que desembocó en un conflicto diplomático. En este sentido, destacan que el control policial por parte de Marruecos de las bolsas de subsaharianos que se concentraban en los montes cercanos a la verja, unido al refuerzo de ésta --se dobló la altura y se la precedió de la sirga tridimensional-- acabaron prácticamente con los intentos de salto de la valla.

EFECTO CONTAGIO EL FIN DE SEMANA.

El hecho de que una veintena de inmigrantes, según la cifra facilitada hoy por el director de Policía y Guardia Civil, Francisco Javier Velázquez, lograse cruzar la frontera en la madrugada del sábado al domingo, animó al resto de los subsaharianos a realizar un segundo intento en la noche de ayer, frustrado por la alerta de Marruecos, precisaron las fuentes consultadas.

Según Velázquez, medio centenar de los inmigrantes que intentaron cruzar la frontera en el primer asalto fueron devueltos 'en caliente', seis se encuentran en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Melilla y una veintena son buscados por las Fuerzas de Seguridad por toda la ciudad autónoma. El cálculo de los inmigrantes que podrían haber cruzado la frontera de forma ilegal se ha establecido repasando las imágenes de las cámaras de seguridad instaladas en el control fronterizo.

PRECAUCIONES EN LAS ÚLTIMAS HORAS.

Aún así, agentes de Policía y Guardia Civil han tenido que doblar turnos en las últimas horas para hacer frente a algún otro intento. De hecho, el lugar escogido para penetrar irregularmente a territorio español supone una novedad que los agentes achacan a la desesperación en la que se encuentran en territorio marroquí los inmigrantes subsaharianos, a los que escasea la comida, duermen al raso y no tienen asistencia sanitaria alguna.

Después de que la doble valla se convirtiera en prácticamente infranqueable, el último intento de salto de la valla de Melilla se remonta a la Nochebuena de 2006. Hasta este fin de semana los indocumentados sólo tenían la opción de ir ocultos en dobles fondos de vehículo o cruzar a nado la distancia de un kilómetro que separa el puerto de Beni-Enzar. Por esta aduana cruzan a diario 30.000 personas y 6.000 vehículos.