Roquetas.- Pasan a disposición judicial los dos últimos detenidos por los altercados de las '200 viviendas'

ALMERÍA, 10 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Guardia Civil ha puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número uno de Roquetas de Mar (Almería) a los dos últimos de los diez varones de origen subsahariano detenidos por su presunta participación en los altercados desencadenados en la barriada roquetera de las '200 viviendas' tras la muerte del joven Ousmane Kote, que fue apuñalado el pasado sábado por la noche.

Así lo revelaron a Europa Press fuentes de la investigación, que precisaron que los dos arrestados, un joven de Ghana que fue reconocido como uno de los participantes en los disturbios de la madrugada del domingo y otro varón de Gambia que se resistió a la autoridad en un control de identificación, pasaron a disposición judicial en las últimas horas.

Ambos fueron detenidos por el Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) de la Guardia Civil en la tarde del pasado lunes, el primero imputado de los delitos de desórdenes públicos, daños en vehículos y lesiones y el segundo, por resistencia, desobediencia y atentado contra agente de la autoridad.

Por otra parte, la investigación desveló que el ciudadano marroquí detenido ayer por su presunta implicación en el homicidio de Ousmane Kote, un menor de 17 años de edad, no es el autor material del apuñalamiento, si bien la investigación tendrá que determinar ahora su grado de participación, ya que podría ser coautor de los hechos.

Al parecer, este joven magrebí presenció y participó, desde el principio hasta el final, en la reyerta en la que murió el senegalés, que falleció cuando, según una de las principales hipótesis de la investigación, trató de mediar en una pelea entre el presunto homicida --que sigue en busca y captura-- y un vecino africano, conocido de la víctima, que discutían por una cuestión de ruidos.

La muerte de Ousmane Kote, sobre la que el Juzgado de Instrucción número uno de Roquetas de Mar decretó el secreto de sumario, provocó distintos incidentes que se saldaron con dos bloques de viviendas quemados y daños en vehículos particulares y oficiales, por los que la Guardia Civil detuvo en total a diez varones subsaharianos, de los que uno ingresó ayer en prisión mientras que otros siete quedaron en libertad con cargos.