Actualizado 08/05/2008 17:03

Fiscalía atribuye la muerte del lince a una "posible negligencia" de la Junta andaluza pero no lo considera delito

HUELVA, 8 May. (EUROPA PRESS) -

La Fiscalía de Huelva ha archivado la denuncia presentada por Ecologistas en Acción en Andalucía para que investigara la última muerte de un lince ibérico de dos años en Doñana y si se había producido alguna negligencia por parte de la Junta de Andalucía, tal y como sostiene la organización. Si bien, el Ministerio Público, aunque atribuye la muerte del ejemplar a una "posible negligencia", no lo considera delito "al no haber una conducta dolosa".

En el documento remitido por la Fiscalía de Huelva a Ecologistas en Acción, al que ha tenido acceso Europa Press, el fiscal jefe, Jesús Jiménez Soria, asegura que ha decidido archivarla sin remitirla al Juzgado correspondiente "por considerar que los hechos no revisten los caracteres de delito, ya que sólo sería punible en su comisión dolosa".

"Dado que la muerte del lince había ocurrido por inanición al haber saltado a un cercado de dos metros de altura al que no pudo salir y siendo una posible negligencia por parte de los funcionarios y autoridades dentro del marco del proyecto 'Life-Lince', de acuerdo con lo dispuesto en los artículos 334 y 338 del Código Penal, los hechos denunciados no podrían ser subsumidos en la conducta sancionada en tales artículos por no haberse cazado el lince y por tratarse de una conducta negligente", asegura el fiscal.

En declaraciones a Europa Press, Cuesta indicó que su organización pensó que dicha negligencia podría ser constitutiva de delito imputable por la vía penal en aplicación del delito ecológico y que por ello presentó la denuncia. Y es que, según explicó, el citado lince, de nombre 'Clavo', murió de "inanición" tras quedar atrapado en un cercado instalado por los responsables del proyecto Life-lince de la Junta de Andalucía en el Espacio Natural de Doñana.

La organización indicó que el ejemplar muerto estaba marcado con un collar para su seguimiento, "con lo que a la negligencia de haber dejado unas instalaciones sin las medidas oportunas para evitar la entrada de linces y que no pudieran salir, se suma el que el equipo de seguimiento no se haya percatado de que el animal siempre aparecía registrado en el mismo lugar, lo que parece indicar que el seguimiento programado no se estaba realizando".

Por ello, independientemente de la actuaciones derivadas de la investigación que inicie la Fiscalía, Ecologistas en Acción exige que se asuman responsabilidades políticas y del equipo técnico responsable del Life-lince, ante el "gravísimo" hecho de que unas instalaciones montadas con el objetivo de proceder a un reforzamiento de la población de linces en Doñana "han acabado siendo una causa más de mortalidad del lince".

De igual modo, el colectivo "informará a la Unión Europea, que paga el Life-lince con una aportación de 26 millones de euros, de la "mortal negligencia", para que pidan explicaciones de lo ocurrido a la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía.

NECROPSIA DEL LINCE.

Por su parte, la Junta de Andalucía informó de que el citado lince falleció a consecuencia de la rotura del bazo, según determinaron las diferentes pruebas con las que se completaron la necropsia oficial del animal, que reveló que el animal murió la noche del 31 de marzo, menos de 48 horas antes de que fuera hallado por los técnicos encargados del seguimiento de linces en el Espacio Natural de Doñana.

Así, según explicó el departamento del ramo, la necropsia muestra un animal "con catálisis avanzada de los músculos que llega al estado de caquexia severa", lo que se genera como fruto de una malnutrición prolongada provocada por la merma en sus facultades físicas como consecuencia de la acción mantenida de algún agente patógeno. En ausencia de otros síntomas, la necropsia oficial y los análisis posteriores han confirmado que la rotura del bazo debió producirse por un traumatismo "severo y localizado".

Además, la consejería indicó que, a pesar de no ser la causa última de la muerte, la desnutrición que sufrió el animal fue un factor que redujo "considerablemente" las posibilidades de supervivencia del lince, pues una "caquexia tan avanzada como la que mostraba es fruto de un proceso de un mínimo de tres semanas".