Actualizado 10/11/2011 09:06

Ascienden a cinco los muertos por la última réplica del terremoto en Van (Turquía)


VAN (TURQUÍA), 10 Nov. (Reuters/EP) -

Al menos cinco personas han muerto por la réplica de 5,7 grados en la escala de Richter que el miércoles sacudió de nuevo Van, ubicada en el sureste de Turquía, tres semanas después del terremoto de 7,2 grados que acabó con la vida de 600 personas en esta misma ciudad, según informa la televisión estatal.

La réplica, cuyo epicentro se ha localizado 16 kilómetros al sur de Van, ha derrumbado siete edificios, entre ellos dos hoteles, además de otras 14 estructuras.

La cadena turca ha informado de que habría unas 100 personas atrapadas bajo sus escombros. Uno de sus reporteros ha indicado que en uno de los hoteles había unas 70 personas, de las cuales 21 ya han sido rescatadas.

Por su parte, la agencia de noticias Anatolia asegura que los operarios han conseguido rescatar con vida seis horas después de la réplica a Miyuki Konnai, miembro del equipo de rescate japonés que se trasladó a Turquía después del terremoto del 23 de octubre.

Tras la réplica, unas 30 ambulancias han sido trasladadas a Van desde Ercis, la ciudad más afectada por el seísmo del mes pasado. También se espera la llegada de cinco aviones con ayuda humanitaria y de varios equipos de rescate procedentes de las provincias de Mus y Agri.

El ministro de Exteriores, Ahmet Davutoglu, que cuando se ha producido la réplica se encontraba en Ercis, se encuentra en el Centro de Coordinación de Crisis de Van. En las próximas horas, está prevista la llegada del viceprimer ministro, Besir Atalay, y del ministro de Sanidad, Recep Akdag.

La población de Van se encuentra en una situación extrema, ya que desde que se produjo el terremoto principal, miles de personas viven en campamentos callejeros con temperaturas invernales. Además, ya se han registrado más de cien réplicas.

Turquía está atravesado por varias fallas sísmicas, por lo que diariamente registra pequeños seísmos. En 1999, dos terremotos provocaron más de 20.000 muertos en el oeste del país.