El juez Andreu desestima la querella presentada contra Salvamento Marítimo por homicidio imprudente de 88 inmigrantes

El magistrado destaca la responsalidad en las muertes de las personas que les facilitaron la patera sólo para enriquecerse

Europa Press Sociedad
Actualizado: lunes, 1 octubre 2007 19:26

MADRID, 1 Oct. (EUROPA PRESS) -

El juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu desestimó hoy la querella presentada por el letrado tinerfeño Alonso Peña contra Salvamento Marítimo al que acusaba de un delito de homicidio imprudente por la supuesta responsabilidad de dos de sus remolcadores, el 'Conde de Gondomar' y el 'Luz de Mar', en el fallecimiento de 88 inmigrantes que viajaban en una patera hundida en las proximidades de las costas españolas el pasado mes de julio con un total de 136 personas a bordo.

El juez considera, en un auto hecho público hoy que no concurren en los elementos necesarios para poder entender que la conducta de los capitanes y tripulaciones de los barcos de rescate fuera constitutiva de una infracción penal ya que los navíos de Salvamento Marítimo "no crearon el riesgo" que desembocó en el fallecimiento de los ocupantes del cayuco sino que "lo pretendían evitar".

"Los incidentes en el ejercicio de las maniobras de acercamiento y rescate no se pueden prever de antemano", destaca el magistrado que añade que en un rescate de este tipo "se debe asumir un riesgo, que es inevitable pues se adopta a fin de salvar la vida de personas que se encuentran en peligro inminente".

Andreu especifica que el hecho de que el barco efectuara "una maniobra brusca" que podría haber favorecido el hundimiento de la patera no es significativo "dadas las circunstancias en que transcurre la acción de salvamento". "La absoluta excepcionalidad y riesgo de tales maniobras hacen que no pueda achacarse una falta de previsión o de destreza merecedora de reproche penal".

"ENRIQUECIMIENTO ILÍCITO"

El juez destaca también en su auto el hecho de que la querella no haga referencia a la responsabilidad en las muertes de los 88 inmigrantes de las personas que les facilitaron la patera. Especifica que los que organizaron el desplazamiento ilegal "merecerían reproche penal".

"No son otros que los que, con el fin de un enriquecimiento ilícito y poniendo en grave riesgo la vida de las personas que a ellos acuden para que les transporten a España, le introducen en embarcaciones con las que de antemano saben que no es posible realizar una travesía como la que prometen", agrega el auto.

La Fiscalía de la Audiencia Nacional rechazó la pasada semana "de plano" la querella al considera que la actuación que se atribuía al capitán del remolcador estuvo motivada "por un fuerte oleaje que desestabilizó la embarcación y provocó su hundimiento". "En ningún modo puede decirse que fue imprudente o que actuó con impericia", añadía el Ministerio Público.

Por su parte, el letrado Alonso Peña, que representa a 15 inmigrantes que perdieron a familiares en el hundimiento de la patera, resaltó, en declaraciones a Europa Press su intención de llevar el caso hasta sus últimas consecuencias y adelantó que recurrirá. "Estoy dispuesto a llevar esto incluso fuera de España", dijo.

FUNDAMENTOS DE LA QUERELLA

Peña fundamenta la demanda en dos motivos, por una parte la negligencia o imprudencia en que en su opinión incurrieron los dos barcos remolcadores que emprendieron el rescate de los 136 inmigrantes que viajaban en el cayuco y fueron avistados a más de 100 millas de las costas de Tenerife -- 'Conde de Gondomar' y 'Luz de Mar'-- y por otra en la carencia en los navíos de dispositivos flotantes que hubieran reducido el número de víctimas mortales una vez se produjo el hundimiento de la embarcación.

Según relató el abogado, la patera fue avistada el pasado 19 de julio a más de 100 millas de la costa de Tenerife por un barco privado que dio aviso a Salvamento Marítimo. En un primer momento arribó a la zona el remolcador 'Luz de Mar', cuyo capitán era el responsable de las maniobras, y que se apostó en las proximidades del cayuco sin abordarlo, explicó Peña en base a las declaraciones realizadas por los supervivientes.

La embarcación, que transportaba a personas procedentes del África subsahariana (Ghana, Senegal, Guinea Bissau, Gambia y Liberia), llevaba 10 días de navegación y la falta de combustible provocó la parada de sus dos motores, relató el letrado.

Sobre las dos de la madrugada llegó a la zona otro remolcador, el 'Conde de Gondomar'. Según explicó el abogado los inmigrantes rescatados han descrito que el barco de rescate se acercó "muy rápido" y dio un giro que provocó oleaje y desestabilizó a la patera. "Poco después, en la aproximación, golpeó a la embarcación y la partió en dos", indicó Peña. Sólo 48 personas pudieron ser rescatadas con vida y otras 88 desaparecieron en el mar.

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