Actualizado 20/11/2009 18:08

Los nuevos enfrentamientos en el noreste de RDC provocan una nueva ola de desplazados, según la ONU


MADRID, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -

Los nuevos enfrentamientos en el noroeste de República Democrática del Congo (RDC) han provocado una nueva ola de refugiados y han dejado las aldeas en las zonas afectadas totalmente desiertas, según han declarado los responsables humanitarios en el terreno a la agencia de noticias humanitarias de la ONU, IRIN.

Se estima que cerca de cien personas han muerto en los enfrentamientos por los derechos de la pesca en el distrito de Ubangi Sur, en la provincia de Equateur, y se cree que otros se han ahogado mientras intentaban cruzar el río Ubangi, que separa los dos Congos. "Hoy tenemos 30.600 desplazados. Hemos tenido un influjo masivo desde ayer debido a la reanudación del enfrentamiento", afirmó el director de la ONG Médicos de África, Rufin Mafuta.

"En una sola semana hemos tenido 24.000 refugiados, un número que ha aumentado rápidamente por los nuevos combates", añadió. "Están expuestos al mal tiempo, las condiciones sanitarias empeoran, hemos registrado casos de diarrea y de infecciones respiratorias agudas y enfermedades cutáneas entre los niños", aseguró Mafuta.

"En Eboko, llevamos a cabo una evaluación y encontramos que hay un gran número de menores solos, ya que han perdido a sus padres", explicó. "A esto se une el hecho de que hay un gran número de mujeres embarazadas", indicó. Una misión de varias agencias a diferentes aldeas encontraron al menos una de ellas totalmente desierta, con los cadáveres aún en las calles, según un informe de la Agencia de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).

Además, entre los refugiados hay miembros de las fuerzas de seguridad de RDC. "Nos hemos visto obligados a huir con nuestras familias porque no tenemos armas ni munición para protegernos", indicó el sargento Wazaba Paluku desde la aldea de Dongou, donde los marineros han tomado refugio en una comisaría.

Por otro lado, la Misión de la ONU para RDC, la MONUC, informó hoy de que al menos once personas han muerto en dos días de enfrentamientos entre grupos rivales étnicos, unos combates que se producen después de que el mes pasado murieran al menos 100 personas en Dongo, entre ellos 47 policías, en una disputa también por los derechos pesqueros.

Más del 70 por ciento de los refugiados son mujeres y niños, el 25 por ciento son jóvenes y el resto ancianos, de acuerdo con el director de la unidad de crisis del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).

La embajadora de RDC a República de Congo, Esther Kirongozi, afirmó que su Gobierno acaba de crear una comisión especial para encontrar una solución duradera a la crisis. Las autoridades también lanzaron una petición para que sus ciudadanos regresen a sus hogares.

Las agencias humanitarias han distribuido unas 15 toneladas de suministros alimentarios y no alimentarios después de una evaluación de los refugiados. "La donación es inadecuada pero nos hemos visto obligados a distribuirla mientras esperamos a que llegue otro tipo de ayuda", subrayó ACNUR. De acuerdo con la Policía, algunos de los refugiados están volviendo a sus hogares en RDC para recolectar sus cosechas antes de volver a cruzar a República de Congo.