Proyecto Hombre desarrolla un programa de ayuda a 500 familiares de drogodependientes financiado por la CAM con 16.000 €

VALENCIA 19 Nov. (EUROPA PRESS) -

Proyecto Hombre ha puesto en marcha un proyecto para ayudar a 530 familiares de drogodependientes con el objetivo de que se impliquen en el proceso terapeútico y ayudarles en la problemática que genera todo el proceso de desintoxicación. El proyecto está financiado por Caja del Mediterráneo (CAM) con 16.000 euros y lo integrarán las familias de unos 80 usuarios los centros de día de Valencia y Sagunto durante un año.

El presidente de la Fundación Arzobispo Miguel Roca del Centre de Solidaritat Proyecto Hombre, José Ferrís, y el director territorial de Caja Mediterráneo, Bernardo Chulià firmaron hoy el convenio de colaboración para financiar el programa conocido como 'Servicio de Información, Orientación y Apoyo Familiar'.

El director territorial de la CAM se mostró "obligado" a apoyar este tipo de iniciativas y aseguró que existe una "no visibilidad" de determinados asuntos, ya que "siempre nos focalizamos en personas drogodependientes pero no en su entorno".

Por su parte, José Ferrís explicó que la drogodependencia ha evolucionado mucho ya que hace 25 años las personas dependientes eran adictas a la heroína y pertenecían a una clase social con familias desestructuradas. Ahora, sin embargo, los drogadictos son cocainómanos y alcohólicos que pertenecen a "familias estructuradas", cuya "percepción del riesgo es menor" ya que con la heroína existía un cambio en el aspecto físico que ahora no se da y se tarda más en detectar el problema, destacó.

Respecto a su entorno, agregó, los familiares sufren "las consecuencias económicas y relacionales" que provoca este problema. En este sentido, subrayó que este programa trata de enseñar a las familias a "cómo comportarse" porque la forma de actuar con un drogodependiente es "diferente" ya que "hay que tratarlo como un enfermo y no como un díscolo social". El drogodependiente es ahora "menos sensible al riesgo" al igual que la sociedad, ya que "no se producen tantos atracos y robos" como sucedía cuando había predominio de heroinómanos.

Por este motivo, consideró que el trabajo con las familias es "fundamental", ya que no se puede rehabilitar al enfermo "sin un entorno que le apoye". "Con los heroinómanos era más difícil porque provenían de familias desestructuradas que no podían ayudarles", dijo.

PARTICIPACIÓN DE LA FAMILIA

La rehabilitación terapeútica de las personas con problemas de adicción hace necesaria la participación de la familia como paso para la reinserción social. Para ello, las personas más cercanas al drogodependiente deben encajar la problemática, asumir el pasado, responsabilizarse en el cambio y trabajar en el proceso de recuperación.

Esta iniciativa cuenta, por tanto, con tres ejes basados en la psicología sistemática que posibilita trabajar en todos los campos de la familia, los roles adquiridos, las relaciones, el grado de comunicación de forma educativa y terapeútica. Los ejes son el itinerario de acogimiento, atención y orientación familiar; el trabajo en el plano afectivo y emocional y, por último, el trabajo en el plano de los valores dañados.

En el programa, los 530 familiares se beneficiarán desde noviembre de 2008 hasta el mismo mes del año siguiente, de forma que durante este tiempo un equipo formado por un psicólogo y un educador que dedicarán 37 horas semanales a funciones terapeúticas y educativas, y que estarán apoyados por 17 voluntarios que durante una media de seis horas a la semana realizarán actividades dinamizadoras de grupo y de convivencia, entre otras acciones.