SAN SEBASTIAN, 29 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los activistas de Greenpeace que desarrollan un acto de protesta en la central térmica de Pasaia (Guipuzcoa) descenderán este mediodía de la chimenea de la instalación, tras permanecer cerca de 50 horas colgados en la misma, coincidiendo con el inicio de la Junta de Accionistas de Iberdrola, según informaron a Europa Press fuentes del colectivo ecologistas.
Los activistas comenzarán el descenso sobre las doce del mediodía. De esa manera, pretenden "decir a los accionistas de Iberdrola", propietaria de la central, que les dan a ellos "la palabra para que pidan el cierre" de la instalación, explicó la representante de Greenpeace, Laura Ojea.
Ojea dijo que el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, aseguró a Greenpeace que "la central ya tenía plan de cierre, que era lo que estábamos buscando, pero a ultima hora de ayer desmintió ese dato a algunos periodistas", a quienes dijo que no era esa central sino una de Asturias. "Vista la falta de credibilidad de la empresa, ahora les toca el turno a los accionistas", añadió.
Greenpeace enviará a lo largo de hoy un comunicado a la medios "con todas las falsedades" que Iberdrola "ha dicho sobre esa planta, y todo lo que contamina", dado que los datos que "se están dando no son tan fiables" como los que maneja el colectivo ecologista, según indico Ojea.
