Actualizado 26/01/2012 13:21

HRW acusa a la Policía francesa de practicar controles de identidad "abusivos" a los menores negros y árabes

Asegura que los agentes efectúan los registros incluso sin indicios de delito y utilizando con frecuencia la violencia y los insultos racistas


PARÍS, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -

La organización humanitaria Human Rights Watch (HRW) ha denunciado este jueves que la Policía francesa hace uso de unas facultades "excesivamente amplias" para llevar a cabo controles de identidad "injustificados y abusivos" a los menores de edad de raza negra y de origen árabe.

HRW hizo público un informe elaborado mediante decenas de entrevistas entre ciudadanos franceses pertenecientes a minorías, incluidos 31 niños, en París, Lyon y Lille. En el documento, la organización asegura que "es frecuente" que la Policía intercepte a jóvenes pertenecientes a minorías, incluso niños de tan solo 13 años de edad, a los que somete a numerosas preguntas, palpa "arbitrariamente" y de forma "invasiva" y revisa sus artículos personales.

"Estas detenciones arbitrarias pueden producirse incluso cuando no hay indicios de que se haya cometido algún delito", según comprobó Human Rights Watch. "Es habitual que se utilicen expresiones ofensivas, algunas de índole racial, y en algunos controles la Policía aplica un uso excesivo de la fuerza", agregó la organización.

Según la investigadora jefe para Europa Occidental de Human Rights Watch, Judith Sunderland, es "escandaloso" que la Policía ponga contra la pared y palpe "arbitrariamente" a "jóvenes y niños negros y árabes" sin que haya "pruebas reales de algún delito". "Sin embargo, para los jóvenes de algunos barrios de Francia es parte de la vida cotidiana", denunció.

"El derecho francés otorga a la Policía amplias facultades discrecionales para llevar a cabo controles de identidad sin ningún tipo de sospecha de delito", según HRW. "La Policía no lleva a cabo ningún registro sistemático de estas detenciones, y quienes son interceptados no reciben ningún documento escrito que explique o deje constancia del incidente", lamentó la ONG.

"A la mayoría de las personas entrevistadas por Human Rights Watch nunca se les dio ninguna explicación en las numerosas oportunidades en que fueron detenidas", agregó. "Al no haber registros, es muy difícil evaluar la efectividad o la licitud de una detención", advirtió Human Rights Watch.

CRITERIOS SELECTIVOS

Los testimonios contenidos en el informe indican que los miembros de la Policía francesa actúan en función de "criterios selectivos de tipo étnico" a la hora de detener a personas, "es decir, adoptan decisiones según la apariencia de un individuo, como su origen racial o étnico, en vez de tener en cuenta su conducta o la existencia de una sospecha razonable de que se cometió un delito".

Un estudio realizado en 2009 por la Open Society Justice Initiative y el Centro Nacional de Investigaciones Científicas de Francia --citado en el informe de HRW-- comprobó que en ese país las personas negras tienen una probabilidad seis veces mayor que las personas blancas de ser detenidas, mientras que en el caso de los árabes la proporción es casi ocho veces superior.

Human Rights Watch recibió varios relatos sobre el uso de la violencia --bofetadas, patadas y descargas aplicadas con armas eléctricas-- por parte de los agentes durante los controles de identidad.

En ocasiones, los que no cooperan, hacen demasiadas preguntas o protestan por el trato recibido durante un control de identidad pueden ser acusados, por vía administrativa o penal, de "insulto a un funcionario", lo cual "disuade a las personas de reivindicar sus derechos", afirmó Human Rights Watch.

Según la organización, los controles de identidad abusivos tienen un impacto sumamente negativo para las relaciones entre la Policía y la comunidad. "La ira reprimida por los abusos policiales, entre ellos los controles de identidad autoritarios, fue determinante durante los disturbios que se produjeron en Francia en 2005 y parece ser la causa de innumerables conflictos de baja intensidad entre policías y jóvenes que se producen en zonas urbanas de todo el país", advirtió.

"SUCIO NEGRO"

"Ciertas experiencias, como ser interceptados varias veces en un mismo día o ser seleccionados en medio de una multitud, agravan la sensación, que prevalece entre los jóvenes pertenecientes a las minorías, de que son perseguidos en forma deliberada", advirtió Human Rights Watch. Aparte, el informe denuncia "la conducta irrespetuosa por parte de los policías", incluido el uso de ciertos insultos como "sucio árabe" o "sucio negro".

"Tanto el derecho francés como el Derecho Internacional prohíben la discriminación, la injerencia injustificada en el derecho a la privacidad y las violaciones de la dignidad y el derecho a la integridad física", advirtió HRW. "Los estándares internacionales y nacionales también exigen un trato respetuoso por parte de la Policía", recordó.