Actualizado 21/04/2009 16:13

Intermon Oxfam pide a los países ricos que dejen de dañar y actúen para evitar la vulnerabilidad al cambio climático

((Vincular a la anterior noticia sobre el mismo tema))


MADRID, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -

La ONG Intermon Oxfam urgió hoy a los países desarrollados a "dejar de dañar y comenzar a actuar" para frenar las consecuencias del cambio climático y sobre todo para evitar la vulnerabilidad ante este problema internacional, que "está aumentando" y que afecta "especialmente" a las sociedades que menos lo provocan, es decir las menos desarrolladas y más pobres. Así lo solicitó hoy la organización durante la presentación del informe 'El derecho a sobrevivir. El reto humanitario del siglo XXI', en el que se alerta de que en los próximos seis años el número de afectados por desastres naturales aumentará en un 54 por ciento, es decir en 133 millones de personas.

Además, según explicó en la presentación la responsable de campañas de Intermón Oxfam, Marta Arias, el sistema internacional de respuesta humanitaria, tal y como hoy está establecido, será "incapaz" de afrontar las próximas crisis derivadas de los desastres naturales. En ese sentido, lamentó que el número cada vez mayor de pequeños y medianos desastres que no genere el suficiente reclamo mediático, lo que se traduce en una menor respuesta internacional.

Así, recordó que según datos de la Federación Internacional de Cruz Roja, en un desastre en un país desarrollado muere una media de 23 personas, mientras que en la misma situación pero en los países menos desarrollados, la media de fallecimientos es de 1.052 víctimas.

Arias subrayó que la vulnerabilidad ante el cambio climático, "que se está produciendo de forma inequívoca", está aumentando, que la rápida urbanización en los países en desarrollo incrementa las personas que viven en chabolas y que la crisis alimentaria global de los últimos años ha elevado el número de personas que pasan hambre en el mundo hasta los 1.000 millones, es decir casi una persona de cada seis.

El informe asegura que el cambio climático es "una tragedia humana" que acabará desbordando el sistema humanitario y provocando la muerte o destruyendo los medios de vida de cientos de millones de personas. Además, la responsable de campañas de Intermón alertó de que tras las víctimas generadas por el clima después vendrán más por la lucha por recursos como el agua o por los conflictos que generarán las migraciones, entre otros efectos.

"Hace falta intervenir, para prepararnos y asistir a los afectados. No es sólo una cuestión de interés sino que es una cuestión de responsabilidad colectiva. La comunidad internacional tiene que actuar para frenar el cambio climático y también para proteger a los que sufren", concluyó.

Por su parte, el meteorólogo de Cuatro Florenci Rey denunció que en muchas áreas del mundo no se están tomando las medidas adecuadas para evitar las consecuencias del cambio climático, que en determinados lugares derivará en crisis socioeconómicas, como migraciones masivas hacia el primer mundo, donde también se notarán las consecuencias. Por ello, apostó porque sean los países desarrollados y causantes en mayor medida de estas consecuencias los que contribuyan "de una forma mucho más aplastante" a frenar el fenómeno.

Igualmente, la meteoróloga de TVE Mónica López recordó que desde 1970 a 2004 los gases de efecto invernadero se incrementaron en un 70 por ciento y que las causas del cambio climático son en un 80 por ciento de carácter antropogénico, de acuerdo a los datos del Panel Intergubernamental para el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) de la ONU.

Así, definió a los gases de efecto invernadero como unos gases que "tienen básicamente mala leche, porque son transparentes a la radiación solar y casi impermeables a la radiación de la Tierra". De tal modo, que abogó por que si la actividad humana es causante y responsable de este problema de carácter global sean los humanos quienes intenten que la situación cambie en el futuro.

REDUCIR LAS EMISIONES Y AUMENTAR LA AYUDA

Entre esas soluciones, el portavoz de Intermón Oxfam para el cambio climático, José Antonio Hernández, insistió en que para combatir eficazmente este mal es preciso "dejar de dañar y empezar a ayudar". En concreto, dijo que durante la Conferencia Internacional contra el Cambio Climático que se celebrará en diciembre en Copenhague (Dinamarca) "tiene que llegarse a un acuerdo con compromiso de reducción de acuerdo a lo que estiman los científicos, es decir en un 40 por ciento de aquí a 2020".

Asimismo, indicó que es "necesario" comenzar a ayudar a los más afectados y que según el lema de 'quien contamina paga' sean, precisamente, los países ricos, "con más responsabilidad y con más capacidad" los que destinen 50.000 millones de dólares anuales, adicionales a la ayuda al desarrollo, para frenar el cambio climático.

Al respecto, cifró en 42.000 millones de euros anuales, la cantidad necesaria para ayudar a las víctimas de los desastres, puesto que se prevé un crecimiento de las catástrofes, ya que en la actualidad el nivel de respuesta es de 50 dólares por persona. En su opinión, ese sería un "primer paso crucial" que calificó como "perfectamente posible si todos los gobiernos de la OCDE actuaran como sus diez miembros más generosos".

José Antonio Hernández apuntó también a la Organización de Naciones Unidas (ONU), de la que estima que debe "liderar la respuesta porque su papel y su liderazgo debe ser central". Pero también, opinó que debe mejorar la calidad de la ayuda humanitaria de tal forma que se programe en función de las necesidades reales así como "incidir en las causas (del cambio climático) y activar un sistema de respuesta adecuado".

Con todo, urgió a "reconocer la insostenibilidad del modelo que ha llevado a una crisis económica, la cual debería servir para replantear las bases energéticas". "Cuanto más tardemos, más costosas serán las reformas", concluyó.