MADRID 21 Mar. (EUROPA PRESS) -
Más del 25% de los cuatro millones de pozos entubados que existen en India y que son la principal fuente de agua potable del país, están contaminados por arsénico, lo que está intoxicando a la población, especialmente la afincada en Bangladesh, donde más del 50% de los habitantes no tiene acceso a los servicios sanitarios más básicos.
Según denunció hoy la Fundación Intervida mediante un comunicado, "en algunas zonas del país la presencia de arsénico en el agua de consumo doméstico se ha convertido en un creciente desastre ambiental, provocado por los cambios en la utilización y la explotación de la tierra".
Estos cambios, implican una "disminución de la capa freática", lo que "facilita la oxidación del arsénico y hace que este metal se convierta en soluble en el agua" contaminando los pozos potables e intoxicando a los consumidores, que acaban padeciendo "lesiones cutáneas, hinchazón y pérdida de sensibilidad en brazos y piernas" y, a largo plazo "cáncer de pulmón, vejiga o piel".
Pese a que la exposición al arsénico puede, según la Organización Mundial de la Salud, mitigarse de forma "relativamente sencilla" suministrando a la población agua limpia mediante tanques, depósitos o cualquier otro sistema, la "debilidad económica de Bangladesh, que depende en gran medida de la ayuda externa para resolver sus problemas de salud pública, dificulta la aplicación de los programas esenciales para aliviar el problema".
En este sentido, Intervida abrió en octubre un nuevo centro de Atención Primaria en Dhaka para atender a 400 familias de la comunidad de Babur Haugah, un barrio periférico de Bangladesh, de población semi-rural, muy aislado --sólo se comunica con la ciudad a través de barcas-- y carente de los servicios más básicos.
En el marco del programa 'Comunidades Sanas', la fundación ha inaugurado este nuevo centro, que se suma a los ya operativos en los slums de Shahjadpur, Korail y Babur Jaigah, barrios periféricos de una capital donde "el 50% de la población vive por debajo del nivel nacional de pobreza y el 36% vive con menos de un euro diario, lo que lo convierte, junto con las altas tasas de malnutrición, en uno de los países más pobres del mundo".