MADRID 30 Nov. (EUROPA PRESS) -
Cada día 900 niños mueren a causa de alguna enfermedad relacionada con el sida, una enfermedad que "está desestabilizando a las familias y a sociedades enteras, dejando a millones de niños sin el cuidado y apoyo que necesitan para sobrevivir, crecer y desarrollarse", según informó la organización humanitaria Save the Children con motivo del Día Mundial del Sida, que se celebra este sábado 1 de diciembre.
"En general, se considera que el VIH/sida afecta principalmente a los adultos; sin embargo los niños se encuentran entre las víctimas más vulnerables al sida en los países en vías de desarrollo", afirmó la organización en un comunicado.
De los 33,2 millones de personas con VIH/sida registradas en el mundo, 2,5 millones son niños, indicó Save the Children. Aparte, cada día 900 niños mueren a causa de alguna enfermedad relacionada con el sida y otros 1.150 son infectados por el virus, prosiguió.
Según el director de Save the Children, Alberto Soteres, "la crisis del sida está desestabilizando a las familias y a sociedades enteras, dejando a millones de niños sin el cuidado y apoyo que necesitan para sobrevivir, crecer y desarrollarse".
Más de 15 millones de niños en el mundo han perdido a uno o ambos padres a causa de la epidemia y los expertos prevén que este número aumente hasta más de 25 millones en 2010.
A medida que los padres enferman y mueren de sida las cargas familiares pasan a los niños, especialmente a las niñas, quienes a menudo se ven forzadas a dejar la escuela para ganar dinero, conseguir comida, cuidar de los enfermos y de otros miembros de la familia. Según Alberto Soteres, "sin apoyo, estas niñas están expuestas cada vez más a la explotación, la pobreza y la discriminación".
La organización cuenta el caso de Priscilla, una sudafricana de 14 años de edad que desde que perdió a sus padres a causa del sida se encarga de limpiar y cocinar, además de pagar la matrícula de un colegio que apenas puede permitirse. Un voluntario del Fórum para el Cuidado del Niño de Save the Children ha puesto en contacto a Priscilla con un trabajador social que la está ayudando a pedir una subvención.
Otro caso es el de Agnes, zimbabueña de doce años, que ayuda a su madre a cuidar de su hermana, que tiene sida y no puede valerse por sí misma. Agnes fue identificada por el programa de Save the Children que enseña a las familias a cuidar de los niños enfermos. Se le entrega equipamiento como guantes, jabón y legía para minimizar el riesgo de infección. Agnes en ocasiones tiene que faltar a la escuela para cuidar de su hermana cuando su madre no está.