MADRID, 19 Oct. (EUROPA PRESS) -
Las inundaciones han dejado sin hogar a miles de desplazados internos que vivían en los campamentos de la capital somalí, Mogadiscio, y en sus alrededores, según declararon hoy los residentes de la zona a la agencia de noticias humanitarias de la ONU, IRIN.
"Las lluvias que cayeron el viernes y el sábado destrozaron gran parte de los refugios", indicó el director de una ONG local, Jowahir Ilmi. "Las inundaciones causadas por las lluvias se llevaron gran parte de los refugios", añadió, y aseguró que muchas de las familias lo han perdido todo.
Otra activista civil de los campamentos, Jadra Ali, declaró a IRIN que muchos de los residentes del campamento para desplazados Ali Somali, que alberga a unas 2.100 personas, duermen ahora al aire libre. "Si, como esperamos, vuelve a llover hoy o mañana, ya no tendremos ningún lugar donde refugiarnos", aseguró.
Por otro lado, Ilmi detalló que las lluvias también están empeorando las condiciones sanitarias de los campamentos. "Las condiciones para vivir son muy malas, pero ahora las lluvias las empeoran", añadió.
Mientras, en la ciudad costera de Kismayo, a unos 500 kilómetros al sur de Mogadiscio, las fuertes lluvias añaden miseria a los desplazados que huyeron de la ciudad durante el reciente enfrentamiento entre los rebeldes de Hizbul Islam y Al Shabaab, explicó otro activista local, quien lamentó que miles de familias de desplazados que no han regresado a la ciudad están "a merced de las lluvias y los mosquitos".
"Al menos 6.000 familias, o 36.000 personas, viven al aire libre o en condiciones muy malas", indicó la fuente. Ya han huido cerca de 900.000 personas del enfrentamiento que se produce en la capital entre el Gobierno y los insurgentes islamistas, desplazados que se han visto obligados a trasladarse en el corredor de Afgoye. El conflicto, la sequía y la hiperinflación han creado una crisis humanitaria en Somalia, donde 3,6 millones de personas dependen de la ayuda alimentaria, según la ONU.