Ecologistas catalanes critican una "acumulación de irracionalidades" en la fuga radioactiva de Ascó I

BARCELONA, 8 Abr. (EUROPA PRESS) -

El grupo Tanquem les nuclears y la Coordinadora para una Nueva Cultura de la Energía (TLN-NCE) reprochó hoy la "acumulación de irracionalidades" que se han dado en la investigación de la fuga radioactiva en la central nuclear de Ascó I.

Los ecologistas critican que la central, en cuyo exterior se encontraron partículas radiactivas procedentes de un conducto de ventilación, no comunicó el incidente al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) hasta tres meses y medio después.

Para el grupo, el incidente se remonta a noviembre de 2007, cuando empezó el arrastre de la materia por el conducto de ventilación, aunque las primeras partículas no se detectaran hasta el 14 de marzo, durante una vigilancia radiológica que se realiza supuestamente una vez por semana.

El TLN-NCE consideró "totalmente incomprensible" que, después de tardar tres meses en detectar las partículas, aplazaran hasta el 2 de abril la decisión de "ampliar el radio de inspección" al exterior. "Resulta pertinente preguntarse si el encuentro de una partícula radioactiva se considera un hecho tan normal que se pueden esperar tranquilamente 18 días antes de comprobar si existen más", apuntó el colectivo.

Para los ecologistas, la "línea de despropósitos" se completa con un nuevo retraso hasta el 3 de abril en informar al CSN del incidente, cuando "la normativa considera que un episodio de este tipo debe ser objeto de notificación inmediata".

80.000 VISITAS.

El grupo Ecologistas en Acción de Catalunya, por su parte, aseguró que un grupo de niños visitó las instalaciones la misma semana en que se detectó la fuga radioactiva. Ante esta información, la entidad mostró su "indignación". "Han demostrado una falta de ética y responsabilidad al permitir la visita de escolares para hacer apología de un tipo de actividad obsoleta, sucia y peligrosa", dijo en un comunicado.

En cuanto a TLN-NCE, lamentó también que la nota aclaratoria sobre el incidente del CSN abra nuevos interrogantes, en lugar de cerrarlos. Entre ellos, los verdaderos efectos sobre la población afectada. Por ello, pidió que se localice y advierta del peligro a todo aquel que estuvo en las proximidades de la central los últimos meses, incluidos los grupos escolares que visitan las instalaciones, cuyo número total se desconoce.

En un comunicado, el grupo advirtió también de que la propia web de Ascó-Vandellòs afirma que 80.000 personas han visitado las instalaciones en sus años de actividad. Por ello, TLN-NCE consideró "necesario" localizar a quienes estuvieron cerca de la central entre noviembre y abril.

Además, reclaman hacer un "inventario exacto del material radioactivo" y evaluar la cantidad dispersada en estas partículas, sobre las que el CSN no aporta una "concreción en el número", que podría rondar las 140. Además, la nota informativa afirma que se dispensaron en la dirección del viento sin especificar cuál era esta.