Actualizado 21/04/2008 19:27

El 80% de las empresas navarras tiene niveles de ruido mayores a los permitidos, según un estudio de UGT

En 2006, el 0,8% de los trabajadores padecía alguna enfermedad relacionada con el ruido


PAMPLONA, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -

El 80 por ciento de las empresas navarras objeto de un estudio supera los valores límite de ruido contemplados en la ley. Así lo concluye UGT, que ha analizado en 500 empresas de diferentes sectores de la Comunidad foral la contaminación acústica a la que están sometidos los trabajadores.

Según la responsable de Salud Laboral de UGT en Navarra, María José Latasa, esto denota "que no se están están aplicando las medidas necesarias". Latasa, que dio a conocer los datos del estudio esta mañana en rueda de prensa, también señaló que cuando se aplican dichas medidas son mayoritariamente "de protección individual", como por ejemplo el uso de cascos auriculares protectores.

Este tipo de medidas, aplicadas por el 100 por cien de las empresas que han adoptado alguna acción al respecto, no son para Latasa las más "apropiadas, dado que "la ley anticipa la medida de protección colectiva".

En este sentido, el estudio del sindicato también desvela que sólo un 23 por ciento de las empresas visitadas cuenta con alguna medida de protección colectiva. Estas medidas comprenden, según indicó la responsable de Salud Laboral del sindicato, desde la compra de máquinas que no emitan ruido, el buen mantenimiento de la maquinaria, su distribución de manera que se pueda atemperar el sonido o el aislamiento.

El estudio, que fue realizado el año pasado, puso de manifiesto, según Latasa, el "gran desconocimiento que hay sobre el tema del ruido en las evaluaciones de riesgo y mediciones". Por ello, el departamento de Salud Laboral de UGT ha editado un folleto, que se repartirá en los centros laborales, para la prevención de la incidencia del ruido.

El folleto trata sobre los efectos y las consecuencias que el ruido tiene sobre los trabajadores y sobre la forma de realizar mediciones. También establece una serie de medidas concretas que se deben aplicar.

Otro estudio realizado en 2006 desveló en su día que un 0,8 por ciento de los trabajadores navarros padecen enfermedades relacionadas con el ruido, según comentó Latasa, que incidió en la dificultad de determinar si el trastorno en cuestión es una enfermedad profesional o no.

Latasa comentó que la contaminación acústica en el trabajo provoca "la pérdida de audición y otra serie de efectos que pueden dar lugar a perturbaciones hormonales y del sueño, así como trastornos nerviosos y sobre todo la pérdida de atención, concentración y rendimiento".

La pérdida de la audición "afecta en el plano laboral y en el plano social", añadió Latasa, que también aclaró que el ruido repercute "a todos los trabajadores sea cual sea el sector". Por ello se congratuló de que en el nuevo cuadro de enfermedades profesionales, que entró en vigor en 2007, se hayan reconocido una serie de actividades como enfermedades profesionales.

Entre este tipo de trabajos están, según explicó la sindicalista "la recogida de basuras, la instalación de equipos de sonido, el uso de vibradores en la construcción, la imprenta rotativa, la molienda de caucho, plástico, piedra y minerales, así como la destrucción de municiones y explosivos".