Actualizado 23/04/2008 15:47

RSC.- La Universidad de Zaragoza y la empresa Sudismin crean una cátedra de reciclaje de residuos de la construcción

ZARAGOZA, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Universidad de Zaragoza y la empresa aragonesa Sudismin han creado la 'Cátedra de residuos Sudismin', con la que pretenden abrir nuevas líneas de Investigación y Desarrollo (I+D) en el reciclaje de los residuos del sector de la construcción y la demolición con el fin de que se conviertan de nuevo en sustancias útiles.

Este tipo de residuos está constituido básicamente por tierras y áridos mezclados, piedras, restos de hormigón, ladrillos, cristales, restos de pavimentos asfálticos, materiales refractarios, plásticos, yesos y maderas.

La creación de la cátedra es posible tras la firma esta semana de un convenio de colaboración entre el rector en funciones de la Universidad de Zaragoza, Felipe Pétriz, y el consejero delegado de Sudismin, Paulino Pérez.

La cátedra está adscrita a la Facultad de Ciencias y su coordinador es el profesor del departamento de Ciencias de la Tierra, Andrés Pocobi. Ésta es la cátedra número 19 de la Universidad de Zaragoza, según informó la institución académica en un comunicado.

El convenio suscrito entre ambas entidades señala que ambas potenciarán la puesta en marcha de nuevas investigaciones, acciones de formación y actos de difusión en el ámbito de los residuos, su gestión, su reutilización, reciclado y valorización para su devolución al ciclo de vida.

SUDISMIN.

Sudismin es una empresa de servicios del sector de la construcción y obra pública, gestora de las instalaciones del centro de eliminación, clasificación y valorización de residuos en el vertedero 'Las Canteras'.

De capital aragonés, se dedica a gestionar residuos de construcción y demolición y lleva tiempo colaborando con la Universidad de Zaragoza para dar respuesta a los retos y problemas ambientales y buscar soluciones integrales a los residuos, así como en otros aspectos relativos a la formación y a las prácticas laborales.

Actualmente, cuando el volumen de deshechos de demolición y construcción en España oscila entre los dos y tres kilogramos por habitante y día (tasa superior a la de la basura domiciliaria), la legislación establece una política de residuos encaminada a incentivar su reducción en origen, dando prioridad a la reutilización, reciclado y valorización sobre otras opciones de gestión.

En esta filosofía, el sector de la construcción resulta especialmente adecuado para la utilización de residuos ya que se trata de un sector que consume un gran volumen de materias primas extraídas de la naturaleza, señalaron las mismas fuentes.