Publicado 22/03/2023 13:08

La Junta señala que los enclaves arqueológicos de Carteia y Doña Blanca reabren al público este jueves en Cádiz

Archivo - Carteia.
Archivo - Carteia. - FUNDACIÓN CEPSA - Archivo

CÁDIZ, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -

Los enclaves arqueológicos de Carteia y Doña Blanca, situados ambos en la provincia de Cádiz, abren de nuevo sus puertas al público este jueves tras un cierre de una semana. Los espacios gaditanos, situados en San Roque y El Puerto de Santa María, respectivamente, recibirán al público en su horario habitual "una vez subsanadas las cuestiones técnicas que obligaron al cierre de los mismos", según ha indicado la Junta.

En una nota, ha señalado que Carteia vuelve a abrir sus instalaciones este jueves, en horario de 10 a 14 horas, de miércoles a domingo, el mismo que el enclave de Doña Blanca. Además, la Agencia Andaluza de Instituciones Culturales, organismo dependiente de la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte, ha asegurado que ya han comenzado con los trámites necesarios para evitar que esta situación vuelva a ocurrir.

La Junta ha recordado que el enclave arqueológico de Carteia, que recibe anualmente unas 4.000 visitas, es la primera colonia que los romanos establecieron fuera de la península itálica, tras la concesión del Senado del título de Colonia Libertinorum Carteia en el año 171 antes de nuestra Era.

Se trata de una vasta extensión de terreno a escasos metros de la playa de Guadarranque, en la que se puede visitar una muralla púnica, un templo romano de época republicana, una piscina de planta basilical, un edificio termal, varias viviendas romanas o domus, una factoría de salazones y un gran edificio de la época del emperador Augusto, entre otros restos.

En cuanto a Doña Blanca, que supera las 4.000 visitas cada año, los restos más antiguos encontrados en él pertenecen a una fase tardía de la Edad del Cobre. De esta fase se han excavado algunos fondos de cabañas dispersas por la base del yacimiento, y de épocas posteriores se pueden observar restos de viviendas, un lagar, hornos de pan, y parte de la muralla, entre otros vestigios. Así, es fundamental para la investigación de la protohistoria no solo en la Península sino también en el Mediterráneo.