Actualizado 15/11/2022 18:48

Carmen Crespo pide al Gobierno de España "flexibilidad total" en la aplicación de la nueva PAC

Reunión con Asaja
Reunión con Asaja - JUNTA DE ANDALUCÍA

ALCALÁ LA REAL (JAÉN), 15 Nov. (EUROPA PRESS) -

La consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, ha pedido al Gobierno de España "flexibilidad total" en la aplicación en 2023 de la nueva Política Agraria Común (PAC) con el objetivo de que "no se convierta en un coste adicional que desincentive el desarrollo de las prácticas medioambientales por parte de los agricultores y ganaderos".

Crespo ha mantenido en Alcalá la Real (Jaén) un encuentro con el presidente de Asaja-Jaén, Nicolás Vico, y representantes de esta organización agraria, y al que también ha asistido el alcalde de esta localidad jiennense, Marino Aguilera. En esta reunión se han abordado temas de gran interés para los profesionales del campo de Andalucía en general, y de Jaén en particular, como los cambios que conlleva la entrada en vigor de la nueva Política Agraria Común (PAC).

Carmen Crespo ha subrayado que "Andalucía ha sido la primera Comunidad Autónoma de España que ha pedido flexibilidad", al tiempo que ha solicitado al Gobierno de España que "haga caso a quienes están en el terreno y saben bien lo que ocurre en el campo, llegue a la flexibilidad total y deje más tiempo para adaptarse a los ecorregímenes", cuya entrada en vigor coincide con "un momento difícil de inflación, altos costes de producción y sequía".

Las estimaciones de la Consejería de Agricultura apuntan a que el olivar andaluz, cultivo de gran relevancia en el territorio jiennense, "perderá alrededor de 79 millones de euros en el período de aplicación de la nueva PAC (2023-2027)".

Como ha apuntado Carmen Crespo, las pérdidas alcanzarían un siete por ciento en la zona de Alcalá la Real (dos millones de euros) a pesar de que "los agricultores lo han hecho bien y que otras zonas no pierden fondos".

La consejera se ha mostrado a favor de "apoyar a un olivar rentable" y ha destacado el carácter ambiental y social de esta cultivo, que contribuye a la conservación del medio ambiente y "al mantenimiento del mundo rural". Al respecto, ha comentado que las alegaciones presentadas desde Andalucía, "por unanimidad con las cooperativas y las organizaciones agrarias", se incluía una cuestión "sentido común" como designar el olivar como "ecoesquema per se".

Esto supondría que "los olivareros, especialmente aquellos con fincas en terrenos con más dificultades, no tuviesen que llevar a cabo nuevas prácticas medioambientales, sino que cumplieran con los requisitos de la nueva PAC con las medidas que ya vienen poniendo en práctica dirigidas por el Greening", ha explicado Carmen Crespo, que ha señalado que finalmente, "no ha sido posible".

Asimismo, la responsable de Agricultura en Andalucía ha puesto el acento también en la vertiente económica de las explotaciones olivareras y ha remarcado que es necesario que "salgan los números" para que los agricultores "puedan salir adelante".

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