JAÉN, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio ha recibido 16 ofertas de empresas interesadas en finalizar las obras de acondicionamiento de la conexión de Sorihuela de Guadalimar (Jaén), con la A-32 (Bailén-Albacete).
La nueva carretera, cuyas obras se paralizaron en febrero de 2012, se va a retomar con el proyecto original y un presupuesto de 6,9 millones de euros, de manera que la vía esté preparada para soportar el incremento de tráfico procedente de la autovía A-32, ahora en obras en este tramo. Además, la Junta ha subrayado en un comunicado que se trata de "propiciar desplazamientos más seguros y rápidos para el conjunto de la comarca de El Condado".
La consejera de Fomento, Marifrán Carazo, ha indicado que esta obra se remonta a hace 13 años y que "primero se paralizó y, posteriormente, los anteriores gobernantes trataron de retomar con parcheos que no resolvían los problemas de movilidad ni era lo pactado con los vecinos de la comarca en 2008, cuando se presentó el proyecto constructivo".
"Dejamos atrás medidas a medias y afrontamos una solución integral a este trazado de la mano de la Inversión Territorial Integrada (ITI) de Jaén", ha dicho.
Con la conversión en autovía, gran parte de los desplazamientos que se efectúan por la carretera A-312 se canalizará por la A-6201, lo que implicará un incremento de la intensidad del tráfico, sobre todo de vehículos pesados.
La extinta sociedad Giasa inició en abril de 2009, con un presupuesto de 14,7 millones de euros, estas obras de conexión, con un tramo de algo más de ocho kilómetros. Sin embargo, la obra se paralizó tres años después, en febrero de 2012, cuándo sólo se había completado el trazado entre Sorihuela y el río Guadalimar.
Este proyecto, según Carazo, ha tenido que resolver "numerosos escollos administrativos", ya que había que rescindir el contrato de la obra iniciada en 2008 y no finalizada, además de paralizar otro contrato que se preadjudicó en 2017 por casi millón y medio de euros que "no mejoraba la conexión a la A-32, sino que planteaba la reparación del firme actual sin resolver su trazado pese a su elevada siniestralidad".
La Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio ha optado por impulsar este proyecto que aprovecha las expropiaciones de la traza original y parte de la obra ya ejecutada, y que permite la conexión directa con la futura A-32, con un acondicionamiento tanto en trazado como en firme y drenaje adecuado.
El resultado supondrá contar con una carretera de un carril por sentido de tres metros de ancho, arcenes de un metro y bermas de medio metro, así como un carril de vehículos lentos en parte de su recorrido. El presupuesto base de licitación asciende 6.898.952 euros, a los que hay que sumar el contrato de dirección facultativa de las obras, con un montante de 285.145 euros.
Antes de llegar a este punto para la licitación de las obras, la Consejería ha tenido que encargar la redacción de un nuevo proyecto constructivo, además, de obtener un nuevo dictamen favorable del estudio ambiental. En paralelo, la Agencia de Obra Pública inició el expediente para resolver el contrato anterior, paso "indispensable" para poder licitar de nuevo las obras, hecho que se culminó a mediados de este año.
La variante que recoge el proyecto originario acortará la distancia entre Sorihuela de Guadalimar y Villanueva del Arzobispo y conseguirá un trazado que contribuya a la eliminación de un tramo de concentración de accidentes.
La finalización de las obras contribuirá a mejorar las comunicaciones de la comarca y asentar una población de en torno a 25.000 habitantes. Su construcción, según la consejera, también ayudará a la actividad económica de la zona con el movimiento de mercancías --aceituna, aceite, residuos, biomasa o ganado-- o para el turismo, gracias a una carretera que servirá de eje para unir la zona Norte con la Sur de la comarca, y las dos vías principales (A-312 y A-301).