Publicado 29/09/2022 14:30

Carazo califica de "deplorable" un puente para la SE-40 y acusa al Gobierno de "restar inversiones" a Sevilla

Marifrán Carazo, consejera de Fomento.
Marifrán Carazo, consejera de Fomento. - JUNTA DE ANDALUCIA

SEVILLA, 29 Sep. (EUROPA PRESS) -

La consejera de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, Marifrán Carazo, ha calificado este jueves de "deplorable" la decisión del Gobierno central de cerrar el arco sur de la SE-40, el tramo entre Dos Hermanas y Coria del Río, con un puente, al tiempo que ha acusado al Ejecutivo de Pedro Sánchez de "restar inversiones a Sevilla" al "enterrar" los túneles, una decisión "unilateral" adoptada con "oscurantismo y sin consenso".

Así se ha manifestado la titular andaluza en la sesión de control al Gobierno en el Parlamento y a preguntas de la diputada del PP Ana Chocano. En su contestación, la consejera ha asegurado que la diferencia entre hacer un túnel o un viaducto es de "616 millones". "¿Han afinado los números el alcalde y el Gobierno para pagar así el Metro?", se ha preguntado Carazo, aludiendo a los más de 600 millones que le corresponde aportar al Ministerio de Transportes en virtud al convenio de financiación acordado políticamente con la Junta de Andalucía pero pendiente aún de firma --las administraciones estatal y autonómica financiarán el tramo norte de la línea 3 del Metro al 50%, cuyo coste supera ya los 1.300 millones de euros por la subida de los costes--.

Para la consejera, es un "despropósito" haber enterrado los túneles por un puente con el "criterio" de que es "más barato". "Es una desfachatez", ha abundado Carazo, para la que un proyecto de esta envergadura debe contar con "acuerdo político y social". Sobre esto último, le ha afeado al Gobierno que haya decidido hacer un puente "en solitario". "No ha escuchado a la provincia de Sevilla", ha sentenciado Carazo, que ha augurado "reclamaciones millonarias" por la rescisión de contratos por las obras de los túneles que se pararon y que se han descartado definitivamente.

La titular de Fomento ha indicado que, además, el puente, de 70 metros de altura y cinco kilómetros de longitud sobre la marisma, deberá pasar por una nueva evaluación ambiental. Al respecto, ha recordado que, ya en 2001, se sometió este paso por el río a una Declaración de Impacto Ambiental que concluyó como inasumible la construcción del puente por su huella en el territorio, el ruido, la contaminación y el impacto visual. La petición de una nueva evaluación ambiental supondrá que "tardaremos años en poder ver la maquinaria de obra pública en este punto de la SE-40".