Biomasa - JUNTA DE ANDALUCÍA
SEVILLA 23 Dic. (EUROPA PRESS) -
El proyecto europeo 'Biomasstep', enmarcado en la iniciativa 'Interreg Poctep' de colaboración hispano lusa, y en el que participa la Agencia Andaluza de la Energía --entidad adscrita a la Consejería de Hacienda, Industria y Energía--, ha desarrollado una innovadora tecnología que permite analizar de manera "inmediata y económica" la calidad de la biomasa mediante el examen de una muestra, lo que "garantizará transparencia y seguridad al sector".
Esta tecnología se va a transferir a las empresas de forma gratuita, según ha anunciado este lunes la Consejería de Hacienda, Industria y Energía, en una nota en la que detalla que la metodología analítica desarrollada por la Universidad de Córdoba, socio líder del proyecto, se basa en la tecnología NIRS (espectroscopia del infrarrojo cercano), que permite predecir de forma "rápida y fiable" los parámetros de calidad de la biomasa, como la humedad, el cloro, contenido en ceniza, e informar de cuánta energía puede obtenerse de ella o qué elementos nocivos puede contener.
Según señalan desde la Junta, la importancia de este proyecto, cuyo ámbito de trabajo se ha desarrollado en Andalucía y las regiones portuguesas del Alentejo y el Algarve, radica en que la calidad de la biomasa es "un aspecto clave para su aplicación energética".
El mercado tiende cada vez más al uso de combustibles estandarizados y certificados, pero no toda la biomasa comercializada cuenta con certificado de calidad que garantice las características deseables desde un punto de vista energético, según apostilla la Consejería.
Con la tecnología desarrollada por 'Biomasstep', las empresas de logística de la biomasa, productores y comercializadoras de biocombustibles, empresas de servicios energéticos, distribuidoras o incluso un gran consumidor van a poder disponer de un equipo que determine, "de manera casi inmediata", la eficacia de la biomasa que vende o compra.
En el marco del proyecto 'Biomasstep' también se ha desarrollado una Plataforma Interregional de la Biomasa entre Andalucía y Portugal, disponible en la web del proyecto --'www.biomasstep.es'--, que funciona como una red transfronteriza entre más de 300 empresas del sector de Andalucía y Portugal, centros de investigación, universidades y administraciones públicas, cuyo objetivo es "fomentar la implantación y transferencia de la tecnología desarrollada".
La Plataforma también incluye información sobre la regulación del sector en España y Portugal, los incentivos económicos existentes e informes.
El proyecto 'Biomasstep' ha contado con un presupuesto de 600.000 euros y dos años y medio de trabajo y, junto a la Universidad de Córdoba --líder del proyecto-- y la Agencia Andaluza de la Energía, participan en el mismo Corporación Tecnológica de Andalucía (CTA), Prodetur, la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA Renovables), la Agencia Regional de Energía de Alentejo (Areana-Tejo), la Agencia Regional de Energía de Algarve (Areal) y el Laboratorio Nacional de Energía y Geología de Portugal y la Universidad de Évora.
LA BIOMASA EN ANDALUCÍA
Desde la Junta subrayan que la biomasa tiene un "gran potencial" en las regiones que han participado en el proyecto, así como argumentan que, en un marco energético como el de Andalucía, "en el que se prima la sostenibilidad, la diversificación, la descarbonización y alcanzar un elevado grado de autoabastecimiento", el uso de la biomasa como combustible para la generación energética "es fundamental".
Según detalla la Junta, Andalucía es la región con el mayor desarrollo de la biomasa energética, con un sector industrial que ha hecho uso de la biomasa para generación de energía térmica desde hace décadas al que le ha seguido el residencial y el sector servicios, donde en los últimos 15 años ha habido un crecimiento "espectacular" de consumo hasta cubrir el 45% del mismo en 2018.
Además, Andalucía lidera la potencia eléctrica instalada para aprovechamiento de biomasa, con un 34% del total. Cuenta con 16 plantas de biomasa sólida y 20 plantas de biogás, que suman más de 260 MW (megavatios).
A esto se suma "la importante capacidad de la biomasa para generar empleo y fijar población en zonas rurales que cuentan con este recurso energético".