BILBAO 30 Nov. (EUROPA PRESS) -
Las Cámaras de Comercio Vascas afirmaron hoy no tener la "menor duda" de que la construcción de la Y ferroviaria "no sólo es conveniente sino imprescindible para el futuro de la economía y de la sociedad vasca", si el País Vasco no quiere quedarse "apartado del progreso".
En un comunicado de prensa, las Cámaras vascas señalaron que, en la actualidad, el País Vasco cuenta con un ferrocarril "que no sirve ya para responder a las necesidades sociales y económicas actuales".
"El modo de transporte ferroviario, que pareció languidecer hace unas décadas, ha recuperado fuerza, aprecio social y eficiencia, hasta tal punto de que en la actualidad se ve en los países desarrollados como un sistema de transporte de futuro, tanto para la movilidad de las personas como para el transporte de mercancías", añadieron.
Por ello, afirmaron que Euskadi necesita un ferrocarril "moderno, capaz de asumir una cuota mayor del transporte de pasajeros y de mercancías, detrayéndolos de unas carreteras muy saturadas". Reclamaron una infraestructura "rápida, segura, bien integrada en el territorio, conectada con la red europea, poco contaminante, eficaz y asequible para los usuarios".
Las Cámaras indicaron que hoy la tecnología "lo hace posible" y que ese ferrocarril es "en gran parte la 'Y' vasca". Asimismo, recordaron que se lleva durante 18 años debatiendo, "aunando" voluntades políticas, "resolviendo discrepancias" y buscando recursos hasta finalmente "conseguir la mejor forma de llevarlo a cabo".
"Es mucho tiempo, pero el esfuerzo dedicado hay que darlo por bueno con tal de que el proyecto pueda nacer a la realidad", manifestaron las Cámaras, insistiendo en que la Y vasca es un "proyecto democráticamente decidido por los vascos".
En este sentido, señalaron que, aunque no concite el apoyo de todos, "no por ello deja de ser legítimo al estar firmemente respaldado por una mayoría social".
Las Cámaras de Comercio manifestaron que es el momento de "actuar y trabajar" y hacerlo "aplicando un extraordinario rigor a la minimización de los impactos menos favorables que todo proyecto de esta envergadura puede comportar".
Por todo ello, las Cámaras afirmaron que apoyan "sin duda y, con todo rigor", la ejecución de este proyecto "esencial para la economía y la sociedad vasca".