El CES cree que temporalidad, parcialidad y baja tasa de actividad son "desajustes pendientes" del mercado laboral vasco

BILBAO, 18 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Consejo Económico y Social vasco (CES) advierte de que la baja tasa de actividad en Euskadi (56%), junto al "elevado peso" de la temporalidad y la parcialidad, son "desajustes pendientes" del mercado laboral vasco.

Tal como recoge la Memoria Socioeconómica del País Vasco correspondiente a 2021, presentada este lunes, a estos elementos, se ha unido este año la "preocupación" por el actual escenario inflacionista, por sus repercusiones negativas sobre la rentabilidad de la actividad productiva y el poder adquisitivo de la ciudadanía.

Por ello, el CES apela a la necesidad de llegar a acuerdos y a tomar medidas que permitan superar esta situación y eviten generar una "espiral inflacionista a medio y largo plazo".

Así lo han expresado en la presentación del informe, tanto la presidenta del organo consultivo, Emilia Málaga, como el presidente de la Comisión de la Memoria Socioeconómica, Jon Barrutia, quienes han detallado los principales retos detectados que les han llevado a sus propuestas y consideraciones sobre la situación socioeconómica vasca.

El órgano consultivo vasco ha advertido en su análisis que "persisten las bajas tasas de actividad en ambos sexos y en todos los grupos de edad, en comparación con los países del entorno, al situarse en el 56% en Euskadi, lejos de la media europea, situada en el 73%.

En su opinión, esa distancia indica que esta situación es especialmente preocupante en los casos de las mujeres y las personas de mayor edad, así como en las personas con menor cualificación, ya que siete de cada 10 desempleados tenían baja cualificación formativa.

Tras considerar que en 2021, se ha dado un crecimiento del empleo, que prácticamente ha permitido recuperar la situación prepandémica, el CES ha alertado, no obstante, sobre el aumento de la temporalidad y del empleo a tiempo parcial, a la espera de los efectos de la Reforma Laboral aprobada a finales de 2021.

Ese peso de la temporalidad y la parcialidad sigue siendo, a su juicio, muy elevado, y es uno de los "desajustes pendientes" del mercado laboral vasco, ya que afecta, en mayor medida, a los que ya se encontraban en situación de vulnerabilidad previamente.

Asimismo, insiste en que la atención a los colectivos con mayor desempleo no debe verse afectada por las problemáticas coyunturales y que es necesaria su inserción laboral en términos estables y de calidad.

Respecto a la baja tasa de actividad vasca, la presidenta del CES ha apuntado a que cuestiones como la escasez de trabajadores, unida a esa baja tasa de actividad confirma que hay mucho recorrido en esa materia, lo que obliga a "poner encima de la mesa y profundizar en ese debate, para hablar de aspectos como "las medidas de conciliación que, probablemente, no estén teniendo el efecto deseado".

Málaga ha reclamado una estrategia para el desafío demográfico, que reclama "centralidad" en las políticas públicas, ya que la opinión compartida en el seno del Consejo es que Euskadi debe estar pendiente de ello", aunque no existe la percepción de que "deba ser considerado de por sí, ahora mismo, un problema".

"Desde el CES decimos que hay que contemplar todos los ángulos en materia demográfica para que, lo que ahora está ya detectado, no acabe convirtiéndose en un problema", ha remarcado.

El informe del órgano consultivo ha destacado el crecimiento notable de la situación económica, aunque "en un entorno que se va complicando, con una inflación que ha sido un invitado inesperado y desestabilizador que nadie esperaba".

POBREZA

Uno de los puntos centrales de la memoria apunta a "la evolución negativa de los indicadores de pobreza, tanto general, como energética, y avisa de que más del 40% de las situaciones de pobreza afectan a la población de origen extranjero de fuera de la UE, mientras que un 15% más corresponde a familias monoparentales encabezadas por mujeres sin ocupación estable.

Asimismo, llama la atención sobre la circunstancia de que, debido a la pandemia, "puede haber personas en situación de exclusión residencial, sin cobertura por parte del sistema de protección social".

La memoria alerta también de la "alta dependencia energética" de Euskadi, que ronda el 90% (89,8%), muy por encima de la media de la UE, 54,9%, y la media española, que se sitúa en el 72,8%.

El organo consultivo reconoce que ha habido "importantes" avances en materia de inversión en energías renovables, pero Euskadi "no logra llegar a las cifras y los objetivos propuestos en la Estrategia Energética de Euskadi para 2030.

En cuanto a la protección social, el órgano consultivo manifiesta que, a pesar de los problemas, el sistema vasco de protección social ha mantenido su cobertura en niveles comparables a los principales países europeos, acercándose al porcentaje de gasto respecto al PIB en Europa, y mejorando el del Estado, lo que confirma, a su parecer, la necesidad de "contar con un sistema de protección social fuerte".

En este punto, Málaga ha afirmado que se ha comprobado, con la pandemia, que "cuando surgen crisis, la recuperación es más rápida con acuerdos en materia de diálogo social que, en este caso, han sido determinantes para construir un escudo social inteligente".

En ese sentido, ha apelado a mantener esos acuerdos en un futuro porque serán "fundamentales" en un escenario como el que se presenta.

El Consejo apela, asimismo, a la necesidad de "centrar" la política fiscal y presupuestaria en "mejorar" los servicios públicos esenciales (sanidad, servicios sociales, educación e investigación), y utilizarla para "aliviar la presión del incremento de precios en colectivos vulnerables".

FONDOS NEXT

De la misma manera, el CES reitera "la necesidad" de aprovechar los fondos europeos Next Generation para "fortalecer los servicios públicos y la inversión pública y privada".

En este punto, pide que la subida de la recaudación fiscal se combine con "una buena gestión" de dichos fondos europeos.