Reconoce que la precariedad y flexibilidad laboral son un problema y dice que son "fruto de políticas de empleo decididas en Madrid"
BILBAO, 6 Ene. (EUROPA PRESS) -
El lehendakari, Juan José Ibarretxe, cree que el Concierto Económico finalmente "va a contar con seguridad jurídica" y que se está cerrando "un ciclo de recursos por parte de comunidades que nunca debiera haber empezado".
Ibarretxe realiza estas reflexiones en una entrevista publicada en el anuario 2006 de la Cámara de Comercio de Bilbao y recogida por Europa Press, en la que reconoce que la precariedad y la flexibilidad laboral son un problema en Euskadi, pero añade que esos efectos son "fruto de políticas de empleo decididas y ejecutadas desde Madrid".
En sus manifestaciones, el lehendakari señala que, si algo demuestra el Concierto, es "la capacidad que tiene para dotar al país en su conjunto de infraestructuras modernas, para incentivar el progreso, para alcanzar la modernidad, para dinfundir el conocimiento o para tener mayor asistencia social".
"Es un derecho de este país que bien utilizado produce beneficios y que mal gestionado arroja pérdidas. Creo que vamos a contar con seguridad jurídica y creo que estamos cerrando un ciclo de recursos por parte de comunidades que nunca debiera haber comenzado", agrega.
ESCENARIO ECONOMICO
El lehendakari destaca los "buenos" indicadores socioeconómicos que presenta Euskadi y que son fruto del "esfuerzo y el trabajo de todos". A su juicio, el éxito radica en que se ha sabido encontrar "una fórmula de encuentro y cooperación común y conjunta para competir como país en el exterior".
Ante las críticas de los sindicatos al modelo económico, asegura que Euskadi es un "país moderno en el que el reparto de la riqueza se produce de forma equilibrada". En este sentido, asegura que el Gobierno "ni ha creído, ni ha aplicado nunca políticas neoliberales".
Ibarretxe destaca que en Euskadi existe un sistema de protección social para atender a los más desfavorecidos que es "de los más avanzados y equiparable a los países del Norte de Europa". No obstante, reconoce que la precariedad y la flexibilidad laboral es "un problema", pero que no lo ha generado el Gobierno vasco "porque se nos han negado siempre las competencias en empleo".
"El Gobierno ni trata ni va escurrir el bulto, pero es importante saber que estos efectos son fruto de políticas de empleo decididas y ejecutadas desde Madrid. Para acabar con la precariedad, habría que cambiar la legislación y eso no lo podemos hacer", añade.
Por otra parte, destaca la importancia de realizar un "cambio estructural" de la especialización sectorial para mantener una "ventaja competitiva en producciones de mayor valor añadido". Por ello, considera que la creación de empresas y el fomento de la cultura emprendedora adquieren "una importancia clave en la estrategia de competitividad".
El lehendakari precisa que las empresas nuevas son "básicas" para la regeneración del tejido productivo existente, ya que "marcarán el camino para la innovación, el crecimiento y el desarrollo de las nuevas actividades productivas".
Por otro lado, Ibarretxe no considera que el mayor incremento de las importaciones sobre las exportaciones sea un reflejo de pérdida de competitividad de las empresas vascas. Añade que la productividad por persona empleadas es del 121% de la UE y las exportaciones han crecido un 17% en el primer semestre de 2006, "muy por encima de la media de nuestro entorno".
Ibarretxe cree que se podría decir que "existe riesgo de perder competitividad" y que, por ello, se deben poner todos los instrumentos "para hacer frente a los riesgos y convertir las amenazas en oportunidades". "Somos muchos los que competimos en el mismo espacio, y en esta carrera debemos correr más que los demás para estar a la cabeza", añade.
En este sentido, el lehendakari destaca que Euskadi está "a la altura de los retos que plantea la globalización", pero "no hay que dormirse" y hay que seguir trabajando para "no perder el ritmo de adaptación a los avances tecnológicos".
Ibarretxe afirma que le "preocupan" los efectos de la deslocalización y que, para evitarlo, "no hay más remedio que conseguir que todo el país compita con su formación, capacidades tecnológicas, sus infraestructuras y su clima laboral y social". "Siempre estaremos apoyando e intentando liderar el progreso, pero no es una labor que sea de competencia exclusiva de las instituciones", agrega.
El lehendakari asegura que la innovación, la sostenibilidad y la solidaridad son "los tres pilares o retos a acometer" y añade que el desarrollo deberá ser sostenible porque "quien no lo haga así, lo pagará".
