Jáuregui dice que la condición al diálogo debe ser "mucho más contundente" y exigir un final definitivo de la violencia

Actualizado: martes, 16 enero 2007 12:47

Cree que ETA no pretendía iniciar una "ofensiva" pero que habrá que esperar para ver cuál es "su reacción" ante la postura del Gobierno

BILBAO, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -

El diputado del PSOE Ramón Jáuregui afirmó hoy que, tras el atentado de Madrid, la condición "previa" para abordar un diálogo debe ser "mucho más contundente" y exigir "un final definitivo" de la violencia e instó a la izquierda abertzale a "recuperar su autonomía". Asimismo, consideró que ETA no pretendía iniciar "una ofensiva terrorista" aunque advirtió de que habrá que esperar para ver su "reacción" ante la postura del Gobierno.

En una entrevista concedida a ETB, recogida por Europa Press, el diputado socialista opinó que es preciso "aprender de la experiencia", que demuestra que ETA "nunca abandona del todo la violencia" y cuando "nos propone ese final que le ofrecemos a través de una tregua, siempre la ha roto o ha habido un acompañamiento táctico inclusive de la violencia como una especie de telón de fondo, de coacción sobre el diálogo".

"Y esto no puede ser, me parece una condición 'sine qua non'", señaló mostrando su coincidencia con el análisis del coordinador de Aralar, Patxi Zabaleta, de que la banda "se ha cargado no la tregua, sino las treguas", de modo que "probablemente este instrumento ya no vale y tendremos que tener para abordar un diálogo una condición previa mucho más contundente: tendrá que haber un final definitivo de la violencia, no transitorio, ni desde luego paralelo, es decir, no un diálogo con una violencia 'controlada' o 'contenida'".

Asimismo, destacó la importancia de que no haya un diálogo político como condición al final definitivo de la violencia. En este sentido, explicó que "el diálogo político lo admitimos, pero tiene que ser después de la violencia". "Como dijo Josu Jon Imaz, primero la paz, y luego la política", agregó.

De esta manera, insistió en que es necesario "dejar muy claro" que no descartan que hay "un diálogo político pendiente en la democracia vasca, en la búsqueda de un marco jurídico-político autonómico en el que todas las posibilidades políticas puedan realizarse", pero que es preciso "hablar sin presión".

Por tanto, señaló que la izquierda abertzale debe asumir que hay que exigir a ETA que "pare" la violencia para poder "hablar políticamente después" y tiene que "recuperar su autonomía política" porque "han quedado como títeres otra vez, igual que en el 99". "Todo lo que parecía que era un presagio de autonomía política con el discurso de Anoeta, ha quedado en nada, porque el atentado ha vuelto a marcar quién está en el puente de mando de ese entramado político y violento", lamentó.

En caso de que la izquierda abertzale no realice el recorrido demandado, indicó que "la democracia tiene que saber responder a ese reto porque establece, en su propia generosidad, también sus reglas" y añadió que "tienen que entender que no podemos hacer lo que ellos pretenden imponer con la coacción de la violencia".

"Es mentira que tengamos que buscar una solución política a sus pretensiones porque ésa es la razón de la violencia. Mentira. ¿Hay problemas políticos?, pues claro, como en todas partes (...)" pero las pretensiones en este ámbito deben "ganarse" en la democracia "jugando con las reglas de los demás", aseguró.

Jáuregui rechazó que se deban "arreglar esos problemas políticamente antes para que ellos dejen de matar" y señaló que "la democracia tiene que imponérselo a los violentos, y si hay que aguantar, aguantamos, pero todos juntos" porque los vascos "queremos decidir democráticamente pero sin presión del terrorismo".

En este sentido, consideró "muy importante" que, en este momento, el conjunto de las fuerzas políticas vascas "está muy unida" junto al Gobierno. De esta manera, destacó que Rodríguez Zapatero "ha ganado una gran legitimidad" en ese sentido porque "ha mostrado un talante, una actitud, una estrategia que es la que en conjunto diseñamos hace 20 años y la que generosamente hemos seguido en estos últimos meses".

A su entender, "el único error" del Gobierno fue "haber pecado de un optimismo que no fue oportuno" en la víspera del atentado, como reconoció el presidente ayer, pero el conjunto de la estrategia "ha sido correcta". "El trabajo lo hemos hecho correctamente y hemos avanzado en la dirección correcta, otra cosa es que ETA es una organización que ha tenido su reacción en una dirección más bien de ruptura que de otra cosa", destacó.

INCÓGNITA DESPEJADA

En cuanto a la posibilidad de que se produzcan nuevos atentados, opinó que el último comunicado de ETA "dice que inicialmente no era su intención" abrir una "ofensiva terrorista", como sucedió en el año 2000. De esta manera, subrayó que el comunicado, que es "un sarcasmo", dice que "ellos no han roto. Obviamente lo han roto, pero que no quieren romper".

En este contexto, a su entender, "la primera incógnita está despejada: ellos inicialmente no han lanzado una ofensiva terrorista como lanzaron en enero del 2000". Tras esto, añadió, "la segunda pregunta es después de este comunicado tan raro, que parece fruto de un equilibrio interno en la propia organización terrorista", cuál va a ser "su reacción" en la medida en la que "el Gobierno reacciona a la ruptura del diálogo estableciendo el principio de que con violencia no hay diálogo, cuál va a ser su reacción", un aspecto en el que eludió "especular".

No obstante, dijo querer "pensar que, con todo, en ese mundo están ocurriendo cosas que les puedan llevar a pensar que volver a matar no es posible". En este contexto, instó a "esperar firmes, unidos combatiendo el terrorismo, pero probablemente no está en nuestra mano decir qué va a pasar en los próximos meses".

Por otro lado, el diputado del PSOE lamentó que, durante el debate de ayer en el Congreso de los Diputados, se produjera "una especie de mensaje rotundo de ruptura de todos los puentes" por parte de Mariano Rajoy, frente a la "mano tendida hacia todo el mundo" del presidente del Gobierno y al resto de partidos "diciendo que estaban de acuerdo".

Jáuregui indicó que el Gobierno "va a tomar probablemente la iniciativa y que previsiblemente hará alguna propuesta para formar ese frente unido o este gran consenso en la estrategia contra el terrorismo". A su entender, "es lo que procedía" porque la ruptura del diálogo por parte de ETA "nos vuelve a situar en otro escenario".

"CIERTA COINCIDENCIA"

Asimismo, destacó que existe "una cierta coincidencia" en que la estrategia que se debe aplicar tras el atentado de Madrid "es común". "Como hemos dicho casi todos, con violencia no puede haber diálogo, no se cumplen las condiciones que habíamos exigido para que ese diálogo final pueda conducirnos al final de la violencia, pero es importante destacar que existe una gran discrepancia con el PP, que no concibe el 'final dialogado'".

En este sentido, recordó que se trata de una expresión que ya se utilizó en el Pacto de Ajuria Enea y que luego se reprodujo en la resolución del Congreso de Mayo de 2005 y se mostró convencido de que es "una aspiración de todos los vascos y de todos los partidos". "También del PP en su momento", agregó.

El dirigente vasco matizó que "siempre hemos contemplado que el final de la violencia requiere que haya un diálogo para ese final", lo que no significa que deba haber "una negociación política", sino "un diálogo cuando consideramos que en la otra parte existe una voluntad inequívoca de abandono de la violencia".

Jáuregui señaló que "esto es lo que en este momento separa al PP de nosotros", pero es "una separación táctica, partidista porque también ellos lo han firmado y lo han pretendido, como en año 99 cuando fueron a hablar con ETA".