CÁCERES, 6 Nov. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Bienestar Social, Leonor Flores, informó esta mañana que Extremadura tienen previsto albergar en sus centros a unos 50 inmigrantes menores de edad procedentes de Canarias, lo que supone incrementar en 20 el número actual de acogidos.
Así lo anunció Flores en la inauguración de las Primeras 'Jornadas sobre el Islam y la inmigración: aspectos jurídicos y sociológicos', que se celebran en la Facultad de Derecho de la Universidad de Extremadura, en Cáceres.
Según explicó, los pequeños que son acogidos en centros de la comunidad autónoma reciben un plan de actuación concreto en el que, en primer lugar, se trabaja en un proceso de "conocimiento del lenguaje y del lugar en le que están y de la cultura en la van a vivir". Tras ello, el sistema educativo los integrará "de manera normalizada, porque son tutelados del mismo modo que cualquier otro niño de un centro de menores", apostilló.
En cuanto a las jornadas, dijo que surgen en virtud de un convenio suscrito con la Universidad de Extremadura. Su objetivo es, según Flores, que antes de que se produzca "una oleada mayor de inmigrantes, hay que prevenir determinadas situaciones como el conflicto entre una cultura minoritaria y otra mayoritaria".
Para ello la consejera destacó dos claves: "vivir en un espacio multicultural y entrar en contacto con los jóvenes y las madres", ya que, según añadió, "los jóvenes se adaptan muy bien a entender que pueden coexistir dos tipos de culturas, la mayoritaria y la minoritaria", y las mujeres "porque son las que llevan el peso de las familias, por lo que pueden influir en el cambio de mentalidad".
Asimismo, destacó que antes de trabajar, hay que estudiar cómo influye esta nueva situación en las sociedades rurales y urbanas, para determinar "el modo en que las minorías aceptan la cultura mayoritaria a la que llegan y viceversa"
Flores se mostró tranquila con respecto a que por el momento no hay en la región "un gran número de inmigrantes que nos presione", aunque detalló que sí existen experiencias en Extremadura de comunidades con un alto índice de población inmigrante, como es el caso de la comarca de Campo Arañuelo, en la que residen 15.000 musulmanes, el 35 por ciento del total.
Así se refirió al "pequeño incidente" ocurrido en esta zona a raíz de la construcción de una mezquita, y abogó por trabajar en materia de educación y sanidad para evitar que se vuelva a producir.
En el caso del colectivo de rumanos temporeros, el conflicto podría nacer, según Flores, a partir de la "falta de compromiso" de aquellos empresarios que no garantizan vivienda, no da de alta en la seguridad social a los trabajadores, o no los acoge bajo el reglamento vigente en el campo.
La consejera concluyó explicando que la Junta de Extremadura prevé entregar "propuestas para mejorar la ley vigente, si es que hay que cambiarla, hacia la tolerancia y la integración".
Las jornadas pretenden analizar de una manera multidisciplinar la cuestión, con conferencias y mesas redondas de profesionales del ámbito jurídico, religioso, académico, político y social. A través de las dos cuestiones planteadas, Islam e inmigración, se descubrirá una sociedad plural donde existen distintos credos religiosos e identidades culturales diferentes.
Desde el ámbito jurídico, se profundizará en cuestiones concretas como la libertad religiosa del musulmán en el ámbito laboral, la situación jurídica de la mujer islámica respecto al matrimonio, y la enseñanza religiosa del Islam en los centros educativos.
Otras exposiciones se centrarán en cuestiones sociológicas y como el papel social de la mujer en la comunidad islámica y se expondrá un trazado de la presencia islámica en España. Especial atención se dará al caso de Extremadura, sobre todo a Talayuela como modelo de integración social de la comunidad musulmana en un municipio de la región.
