CÁCERES 9 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente del PP en Extremadura y candidato a la Junta, José Antonio Monago, ha señalado este lunes que, en caso de conseguir el Gobierno regional, propondrá un calendario de pagos a proveedores de la Administración regional para que "el cobro de las facturas no se eternice y no deje en el camino a las empresas", además de un techo de gasto para evitar endeudamientos.
En este sentido ha recordado que el Gobierno de Fernández Vara ha generado "más de 540 millones de deudas" a los proveedores por lo que considera necesario establecer un calendario de pagos "para que quien le venda a la administración sepa cuándo va a cobrar y no se eternice el pago de las facturas, porque las pequeñas empresas que dependen de la administración regional no se pueden quedar en el camino".
Según Monago "para pedir confianza en los extremeños hay que generar confianza y hay que dar ejemplo" y "el primer pagador en la región tiene que ser la administración y no ser el primer moroso y el principal consumidor de crédito que tendría que ir a los emprendedores de la región".
A este respecto ha recordado que en la legislatura que acaba la Administración regional se ha endeudado en "más de 1.000 millones de euros", es decir que "de los bancos extremeños se han sacado más de 1.000 millones que no han servido para atajar el problema del paro", pero "cuando alguien ha llamado a los bancos para pedir crédito le decían que no porque ya estaba comprometido con la administración".
Monago ha participado este lunes en Cáceres en un encuentro con empresarios en el que ha estado acompañado por el coordinador de Economía del PP, Cristóbal Montoro, y la candidata a la alcaldía cacereña, Elena Nevado.
En la reunión, que ha tenido lugar en un hotel cacereño, los responsables del PP han explicado a los empresarios sus propuestas en materia económica de las que el candidato a presidir de la Junta de Extremadura ha vuelto a destacar como "la prioridad", la creación de empleo. "Lo primero es el empleo", asegura, un "problema" al que Monago ha llamado "la cosa", situándolo en el centro de atención.