MÉRIDA, 21 Jun. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Educación, Eva María Pérez, valoró el curso que ahora termina con una calificación de "sobresaliente" y dijo que se ha caracterizado por ser un curso "tranquilo", aunque con una actividad "frenética" por parte de la administración educativa, de los docentes y las familias.
Pérez, se mostró así hoy, a preguntas de los periodistas, momentos antes de inaugurar las III Jornadas Regionales de Intervención Psicopedagógica en Educación Infantil y Primaria, en la que participarán hoy y mañana los 230 profesionales que integran la Red de Equipos de Orientación Educativa.
La consejera indicó que los resultados "positivos" ya se están viendo en indicadores que preocupaban a la administración como era el caso del fracaso escolar. Según Pérez ha habido una "mejora sustantiva" de un 6,2% en este indicador desde que la comunidad ostenta las competencias en materia educativa.
"El balance del curso es positivo, pero mejor será el próximo, que está ya planificado para que empiece sin excesivos problemas", añadió.
JORNADAS
Tal y como explicó la consejera, la finalidad de las jornadas es dar respuesta a la demanda de formación de estos estos profesionales que trabajan en los 36 equipos de orientación educativa y psicopedagógica en la región, de os que 24 son generales, ocho de atención temprana, dos específicos de deficientes auditivos y dos específicos de deficientes visuales. Estos últimos funcionan de acuerdo con un convenio firmado con la ONCE.
Estos profesionales son los responsables de diseñar y coordinar la intervención educativa tanto con las familias como con el alumnado que presenta necesidades educativas especiales, motivo por el que necesitan una formación sólida a la hora de contribuir a mejorar la calidad del sistema educativo extremeño
Las jornadas, que se celebrarán en Mérida hasta mañana, pretenden propiciar la reflexión sobre dónde debe dirigirse el modelo de orientación y qué funciones debe desempeñar el profesional de la orientación en el sistema educativo.
Así, reconoció de forma explícita la magnífica labor que vienen desarrollando en la región.
La consejera, también informó de que se han incrementado de forma considerable los efectivos, repercutiendo en la calidad y en la equidad de la educación en Extremadura, ya que los orientadores tienen como misión fundamental el asesoramiento y apoyo de aquellos alumnos con necesidades educativas específicas y hacer un tratamiento individualizado.
Por lo que respecta a los temas, las jornadas abordarán, por un lado, desde la concepción sistémica, varios aspectos claves en la intervención de los equipos de orientación en los centros, cómo son las relaciones con la familia, con el profesorado y el asesoramiento en la resolución de conflictos.
Por otro lado, se centrarán en la intervención con o sin hiperactividad.
ESTRUCTURA DE LA ORIENTACIÓN EN EXTREMADURA
Los 36 equipos de orientación en la región desarrollan sus funciones en los centros de educación infantil y primaria, ya que son un recurso educativo de ámbito zonal, dependiente de la Consejería de Educación, que contribuye a la mejora de la calidad de la enseñanza, cooperando con los centros educativos en la formación y puesta en práctica de respuestas educativas ajustadas a las necesidades del alumnado.
Los cuatro equipos específicos realizan intervenciones dirigidas al alumnado con discapacidad sensorial complementando las desarrolladas por el equipo general, mientras que los equipos de atención temprana atienden a la población de 0 a 6 años.
En educación secundaria, la orientación corresponde al Departamento de Orientación de cada uno de los institutos extremeños en los que trabajan un total de 132 educadores.
Las funciones que desempeñan los profesionales de los equipos de orientación se desarrollan básicamente en los ejes de colaboración con el profesorado, la atención individualizada a los alumnos colaborando con el equipo docentes y la potenciación de la cooperación entre los centros educativos y la familia.
Además, los equipos de orientación se ocupan de informar y orientar a las familias sobre los aspectos que resulten básicos para el desarrollo personal, escolar y social del alumnado con necesidades educativas especiales, dinamizando la participación de las familias en la vida del centro y contribuyendo a la formalización de las familias para abordar la tarea educativa.
