El PP extremeño sostiene que en el País Vasco no cabe un "cambalache" como el tripartito catalán o el bipartito gallego

Monago califica de "proeza" el resultado de Basagoiti y afirma que Rajoy "está haciendo lo que tiene que hacer"

Europa Press Extremadura
Actualizado: jueves, 5 marzo 2009 18:29

MÉRIDA, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente del PP extremeño, José Antonio Monago, sostuvo hoy que en el País Vasco no cabe un "cambalache", vocablo que utilizó para referirse a las alianzas del Partido Socialista con nacionalistas, como el tripartito catalán o el bipartito que funcionó en Galicia durante la última legislatura.

"Un cambalache no se puede hacer, como el de un PSOE gallego con el BNG o como el del tripartito en Cataluña con Esquerra Republicana; creo que eso no cabe en el País Vasco, entre otras cosas porque perdería mucho crédito el Partido Socialista en toda España", subrayó Monago, quien apostilló: "hemos tenido dos antecedentes, espero que no se produzca el tercero haciendo un nuevo cambalache".

En una entrevista realizada por Europa Press, José Antonio Monago calificó de "proeza" el resultado obtenido por el PP vasco el pasado domingo, dado que en la comunidad vasca "no existen libertad y derechos como existen en el resto de España", lo que significa que sus compañeros de partido no pueden allí "hacer política en la calle" como él hace a diario en Extremadura.

"Uno no se puede acercar a los ciudadanos con la misma libertad que lo hago yo en mi comunidad", sentenció Monago, quien recordó así mismo que el PP hace política en el País Vasco "con gente muy joven y muy vocacional" y con muchos problemas, a diferencia de otros partidos como el PNV o como el Partido Socialista, el cual, considera, se enfrentaba con "menos dificultades" que los 'populares' debido a que "sus veleidades de gobiernos nacionalistas a lo largo y ancho de España les permiten un poco más de maren de actuación".

Otros "handicap" con los que se encuentra el Partido Popular en el País Vasco, agregó Monago, son "un empresariado que apoya tesis nacionalistas muy importante", así como la presencia de medios de comunicación "oficiales, institucionales, que están al servicio del partido en el gobierno". Así mismo cita la "irrupción" de UPyD, que "se quiera o no distorsiona el mapa electoral" y al hecho de que el candidato 'popular', Antonio Basagoiti, era "el menos conocido".

Tras las elecciones, el presidente del PP extremeño apuesta por un gobierno vasco "que defienda la Constitución Española, en primer lugar, y el Estatuto de Guernika; que se sienta integrado en España y no rechace su señas de identidad y su historia; y que no imponga el euskera y apueste por una sociedad mucho más libre y democrática".

Añade que lograrlo "admite" varias "fórmulas" y se refiere a "que gobierne Patxi López con el apoyo del Partido Popular en la investidura sin entrar en el gobierno" o bien "entrando en el gobierno", aunque señala que se trata de cuestiones sobre las que corresponde decidir a sus compañeros del PP vasco.

REFUERZO DE RAJOY

El líder de los 'populares' extremeños sostiene también que los resultados del pasado domingo en Galicia y el País Vasco han demostrado que el presidente nacional del PP, Mariano Rajoy, "está haciendo lo que tiene que hacer, con mucha seriedad y en momentos que no han sido fáciles para el Partido Popular".

"Hemos pasado en una semana de la penitencia a la resurrección", admite Monago, quien concluye que los resultados han puesto de manifiesto que Rajoy es "un líder muy serio y muy eficaz", como ya demostró, recuerda el dirigente extremeño, durante su etapa como vicepresidente del Gobierno o cuando se hizo cargo de la gestión del Prestige y "en tiempo récord consiguió recuperar la zona" contaminada.

"Si en España hay ahora mismo estadistas con un gobierno en la cabeza, sin duda uno de ellos es Mariano Rajoy", apunta José Antonio Monago, quien considera que las críticas recibidas por el líder nacional de su partido antes de las elecciones gallegas obedecían "al deporte nacional que consiste en entronar a un rey y destronar a otro" así como a la tendencia a "no valorar las cualidades de las personas, quedándose en el aspecto exterior".

Así, recordó que antes de que José María Aznar llegase a La Moncloa se le criticaba por ser un "hombre muy serio", lejos del "gracejo andaluz" de Felipe González, pero "luego se demostró que fue un gran presidente". Al respecto, Monago está convencido de que Rajoy llegará a ser presidente del Gobierno y entonces llegarán "las alabanzas a su seriedad y eficacia en la gestión por encima de cualquier otra consideración".

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