MADRID 1 Mar. (EUROPA PRESS) -
El precio de las 30 armas --20 fusiles de asalto HK G36 y diez pistolas Llama M-82-- que fueron sustraídas la madrugada del domingo al lunes en la Base General Menacho del Ejército de Tierra en Bótoa (Badajoz) supera los 30.000 euros, según han informado a Europa Press fuentes del sector.
En concreto, según han indicado las citadas fuentes, el precio de los fusiles de asalto HK G-36 rondaría actualmente los 1.500 euros. Estos fusiles de la alemana Heckler und Kuch, con un calibre 5,56 mm, pueden efectuar hasta 750 disparos por minuto, con un cargador que admite 30 cartuchos. Por sus características, no está permitida su venta en el mercado civil.
Las Fuerzas Armadas españolas incorporaron este fusil en 1999, para sustituir al antiguo CETME L, utilizado durante más de 40 años. El contrato, firmado por el entonces ministro de Defensa Eduardo Serra, incluía la compra de 115.000 HK G36 por 15.000 millones de pesetas que se producirían en los siguientes siete años en la factoría de la empresa Santa Bárbara en La Coruña.
MÁS DE 60.000 FUSILES EN EL EJÉRCITO DE TIERRA
En concreto, el Ejército de Tierra cuenta con más de 60.000 de estos fusiles. Aunque el contrato firmado por las Fuerzas Armadas en 1999 suponía que cada fusil tendría un precio aproximado de 778 euros, fuentes del sector han asegurado a Europa Press que el precio actual de este fusil para otras instituciones es más del doble.
El último contrato sobre estos fusiles se adjudicó en octubre de 2008, cuando la Dirección de Sistemas de Armas de Apoyo Logístico del Ejército hizo pública la compra de nuevos HK G36 por 600.404 euros, a la empresa alemana.
Mientras tanto, las pistolas sustraídas --Llama M82-- están fuera del mercado desde hace años, ya que la fabricante Llama Gabilondo y Compañía cerró sus puertas en 1999. Estas pistolas, que datan de la década de 1980, tienen un calibre de 9mm y un alcance efectivo de 50 metros. Su precio, según las fuentes consultadas, podría rondar los 400 euros.