CAMPO LAMEIRO (PONTEVEDRA), 7 (EUROPA PRESS)
El alcalde de Campo Lameiro, el popular Julio Sayáns, defendió hoy que la catástrofe que los incendios están ocasionando en montes y propiedades agrícolas, tanto del municipio como de otras zonas de Galicia, merecen el establecimiento de una línea de ayudas para los afectados, al igual que ocurrió con la del Prestige.
"Igual que cuando fue lo del Prestige se establecieron tantas ayudas y apoyos, entiendo que ahora, para los agricultores se deberían aplicar las mismas medidas, porque es la misma necesidad", indicó en declaraciones a Europa Press.
Julio Sayáns anunció que tiene previsto reunirse en próximos días con los miembros de la corporación municipal para decidir si se pedirá o no la declaración de zona catastrófica para el municipio.
No obstante, reconoció que, de momento, a los municipios afectados sólo les interesa "acabar cuanto antes" con los incendios que les están asolando".
El alcalde de Campo Lameiro, que se mostró muy afectado por la muerte anoche de un vecino de Fragas que también participaba en las labores de extinción de las llamas, agradeció públicamente la colaboración de los vecinos.
Así, destacó que desde el viernes se "han volcado de lleno" en apagar los incendios, "es algo de agradecer mucho porque hubo una buena coordinación entre ellos, a pesar de la falta de otros medios". De este modo, se refiere a la "poca presencia" de efectivos oficiales en la extinción de incendios, aunque reconoció que hoy sí se ha notado una mayor presencia en la zona con tres avionetas y más medios humanos que están colaborando en estas tareas.
Sayáns rechazó criticar esta circunstancia y alegó que "no es el momento". "No quiero pensar en caliente, pero sí puedo decir que desde el viernes a la una de la tarde cuando se iniciaron los incendios, no recibí hasta ayer a la una y media, una llamada de la Xunta pidiendo dónde debían desplazar una máquina para colaborar en estas tareas", recriminó.
En estos momentos, según informó el alcalde, permanecen activos tres incendios en la zona. El más virulento el de la zona de Fragas, dónde hay más fuerza de viento y que se están desplazando hacia las zonas de Redondo y Gargantáns.
Precisamente, ayer el frente de este incendio se desplazaba por unos siete kilómetros, y ya ha podido ser controlado para evitar su continua progresión aunque no extinguido.
Lo mismo sucede en la zona de San Isidro y la Fonte de Santa Mariña, donde están trabajando efectivos para lograr controlarlo, "porque se acerca la tarde y las condiciones de temperatura para poder extinguirlos van a ser mucho más difíciles", reconoció el regidor.