UU.AA defiende la compatibilidad con el nacional y la Fenil apunta que el de Galicia podría ser adoptable en otra zonas
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 20 Jun. (EUROPA PRESS) -
"No estamos totalmente satisfechos". Admitió el director xeral de Desenvolvemento Rural, Eldemiro López, ante la consecución el 22 de mayo del primer contrato homologado para el sector lácteo en Galicia y que rompió con relaciones comerciales anacrónicas entre industria y productores basadas en pactos verbales.
El motivo, según reveló, es que la Consellería de Medio Rural aspira a la "adhesión total" de las empresas --de momento participan las que recogen el 60% de los que se produce-- y de los representantes de los ganaderos, en referencia a que SLG no se sumó, al contrario que Unións Agrarias y Xóvenes Agricultores
"Las puertas están abiertas para nuevas adhesiones", aprovechó para animar a incorporaciones Edelmiro López antes de participar en unas jornadas sobre contrato homologado lácteo celebrado hoy por Unións Agrarias en Santiago, en el que también participaban el secretario general del sindicato, Roberto García, y el presidente de la Federación Nacional de Industrias Lácteas (Fenil), Luis Calabozo.
El director xeral de Desenvolvemento Rural incidió en el hecho de que la adhesión a esta contrato no es "incompatible" con el modelo nacional, al que si se incorporaron industrias lácteas nacionales, que no tomaron la misma medida con el gallego, "mucho más ambicioso", precisó Edelmiro López.
En todo caso, el alto cargo de Medio Rural interpretó que no hay "razones objetivas" para no lograr el "paso histórico" de que todas las industrias se sumen a este contrato, ya que existen "muchas coicindencias" con el nacional. En cuanto a que el SLG no se sume porque no incluye un precio mínimo de referencia, insistió en que esta exigencia constituiría su "seguro de defunción", ya que recordó que es "imposible" en el actual marco normativo de competencia.
La idea de la compatibilidad de ambos contratos también fue compartida por el secretario xeral de Unións, Roberto García, quien abogó por avanzar en la convergencia de ambos modelos.
Así, defendió que un mismo contrato podría ofrecer varios modelos de formación de precios, en referencia a que el gallego apunta a los criterios ofrecidos por el Observatorio Lácteo, "dejándole a ganaderos y cooperativas libertad para que elijan el modelo que más les convenza", postuló.
LA FENIL.
El presidente de la Federación Nacional de Industrias Lácteas (Fenil), Luis Calabozo, defendió también la puesta en marcha de los contratos homologados cómo positiva para industrias y ganaderos. "Los contratos constituyen un modelo de estabilización y transparencia en él sector", subrayó.
En concreto, celebró la creación de los contratos homologados como una apuesta por la competitividad y por la supervivencia de él sector. En cuanto a los dos modelos de contrato homologado que están encima de la mesa, el presidente de la Fenil abogó también por avanzar hacia homogeneidad.
Así, indicó que el modelo gallego podría ser adoptado en otras zonas del Estado "y otros modelos también podrían ser adoptables en Galicia". Calabozo incluso apuntó que el modelo de factura única que recoge el contrato gallego podría ser aplicable al conjunto del Estado y tomado cómo referencia para el contrato estatal.
