Rural.- La primera Mesa da Carne de Galicia se celebrará el 8 de febrero y tratará de fijar un precio de referencia

SANTIAGO DE COMPOSTELA 19 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Consellería de Medio Rural ha convocado para el próximo 8 de febrero la que será la primera reunión de la Mesa da Carne donde los ganaderos y sindicatos agrarios acudirán con la intención de conseguir un compromiso por parte de la industria de un precio de referencia. El objetivo es acabar con los márgenes comerciales "abusivos" que se registran en estos momentos con un diferencia del 150% de lo que se abona al productor y lo que se paga en el mercado.

Así lo confirmó a Europa Press el responsable de Gandería de Unións Agrarias, Félix Porto, tras la reunión que mantuvo hoy la Ejecutiva Permanente con el conselleiro de Medio Rural, Alfredo Suárez Canal, quien les anunció esta convocatoria.

Porto destacó que se tratará de la primera convocatoria de la Mesa da Carne a la que acudirán con el objeto de conseguir fijar un precio de referencia en base a la clasificación de los canales, "tal y como ya ha sucedido en otras comunidades", recordó.

El sindicalista explicó la importancia de este precio de referencia para acabar con los márgenes comerciales "abusivos" que se están registrando, de los que salen beneficiados para el sindicato los intermediarios o tratantes.

"Nosotros no estamos por la desaparición de este colectivo", aclaró Porto, quien precisó que lo que se pretende es que "cada uno gane lo que tiene que ganar", en referencia a que, finalmente, estos profesionales "le sacan más beneficio" a un ternero que el ganadero que lo ceba durante meses "y sin tener que hacer frente a los costes de producción".

CONTRATO SOCIAL

Tras conseguir una fecha para la Mesa da Carne, UU AA valoró el resultado de este encuentro, donde también destacó la "receptividad" del conselleiro a la propuesta del sindicato de un contrato social, a través del cual se le pagaría un complemento de 6.000 euros a aquellas explotaciones que garantizan el mantenimiento del medio ambiente y producciones de calidad.

Porto explicó que este instrumento ya ha sido activado en países como Francia y comunidades como Asturias y destacó que sirve para garantizar la rentabilidad de estas explotaciones, lo que a su vez fija población y frena la despoblación del rural.

El sindicalista precisó que se trataría de un contrato social con un partida anual de 15 millones para atender a 5.000 explotaciones, sobre todo de vino y carne, y que tendría una duración de cinco años.