LUGO, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -
El secretario xeral de Unións Agrarias, Roberto García, calculó que han entrado en España en las últimas semanas 300.000 toneladas de leche líquido y 350.000 envasado procedentes de Francia. Un hecho que consideró "serio", aunque advirtió de que lo "más grave" es que se introduce "por debajo del coste" que tiene en el país galo, con lo que denunció que se trata de "una práctica ilegal de dumping".
El sindicalista reprobó que los franceses para regular su mercado colocan leche en el español "a un precio inferior al de su mercado y esto provoca nerviosismo en las industrias".
"Lo grave no es que venga leche de Francia barata porque el mercado español tiene capacidad para asumirlo, sino que lo grave es que la industria española pretende con ese cinco por ciento de leche que importa de Francia que se fijen los precios a todo la leche de este país", censuró.
Este dirigente agrario mantuvo que en España cada vez que circulan cisternas francesas "cunde el nerviosismo" en el entorno de la industria a la que acusó de "ponerse de acuerdo para crear esa falsa sensación de que hay que abaratar el producto".
Así, relató que, dos meses después, cuando se para esa importación, "llega de nuevo la incertidumbre a las empresas que se vuelcan en buscar productores".
Ante este comportamiento, Roberto García volvió a insistir en la necesidad de que se busque un "precio de referencia medio" a lo largo del año para evitar estas oscilaciones.
En concreto, Roberto García calculó que el precio en origen que se debería de abonar a los productores en 2008 "tiene que moverse entre las 75 y las 77 de las antiguas pesetas". El motivo de este valor es que la leche francesa se "mete" en España a un precio "que varía entre las 55 y las 57 pesetas, cuando en el país vecino se paga a 68 pesetas".
