MADRID, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
El ex alcalde de A Coruña, el socialista Francisco Vázquez, afirmó hoy, en relación con el sumario del 11-M, que "no sería la primera vez que hubiera errores en una tramitación judicial", pero acusó al PP de "enredar" e intentar sembrar la duda porque "no fue capaz de asumir la derrota electoral" del 14-M.
En una entrevista en Antena 3 TV recogida por Europa Press, Vázquez consideró que la "crispación" actual es una consecuencia directa del 14-M, no de estos dos años de Gobierno. "Todos somos responsables, corresponsables al menos, Gobierno, oposición, políticos, incluso medios de comunicación, y creo está repercutiendo muy negativamente en la estabilidad emocional de los españoles, que están un poco cansados de tanto follón", añadió.
Vázquez estuvo de acuerdo en que la "salvajada" que fueron los atentados del 11-M, que dejaron 191 muertos en 10 trenes de cercanías en Madrid, pudieron "probablemente" influir en el resultado electoral, pero añadió que "si influyeron por culpa del propio Gobierno". "En cualquier país del mundo un atentado como ese hubiera implicado la formación de un comité de emergencia en el cual estuvieran presentes todas las fuerzas políticas y en el que hubiera un trabajo de colaboración entre todos, situación que no se dio en España", argumentó.
Por ello, opinó que ahora "el PP, lo que intenta como consecuencia de la actitud que tuvo el Gobierno de Aznar en aquellas 48 horas, es trasladar al pueblo español la duda de que ese atentado es fruto de una conspiración en la cual sus primeras sospechas de que había intervenido ETA o de que ETA tenía alguna relación directa o indirecta es manifiesta, y que se intenta ocultar".
"Bueno pues no fue así, es un atentado de Al Qaeda y punto y final", apostilló Vázquez. "Fue una auténtica salvajada que pudiera haber hecho ETA porque hizo salvajadas de ese tenor, todos tenemos en mente Hipercor o el cuartel de Zaragoza, pero lo cierto es eso", añadió.
CRITICA A TODA LA CLASE POLITICA
El ex alcalde consideró "bochornoso" que después del atentado los políticos no adoptaran la "reacción que cabía exigir", "cerrar filas" y "formar una piña como pasó en Estados Unidos" después del 11-S. Vázquez lamentó que "hasta el trato de las víctimas es motivo de disputa" y dejó claro que sus palabras no iban dirigidas ni al PP ni al PSOE, sino que "es una crítica a la clase política en general".
Francisco Vázquez no vio problema en que las elecciones se celebraran, como estaba previsto, sólo tres días después del atentado, y recordó que en Nueva York, después del 11-S, el alcalde pidió que los actos programados siguieran con normalidad.
Así, insistió en que en la "situación de crispación que hay hoy en día" pueden tener "algo de culpa los socialistas", pero "quien se ha aislado es el propio Partido Popular". "El año que viene va a haber unas elecciones en las que hasta en el ayuntamiento más pequeño el PP ha llegado a una situación tan demencial en la que o tiene la mayoría absoluta o no encuentra socio con el que gobernar", recalcó.
"Hay situaciones que yo no recuerdo desde 1977", dijo, sobre todo el que "se haga política de oposición en materia de terrorismo". "Nunca ha habido debate político sobre el tema terrorista, y ahí el Partido Popular está en una desmesura importante", añadió, atribuyendo esta actitud, de nuevo, a que parte del PP no aceptó la derrota electoral el 14-M.
Pero además, consideró que el PP "hizo muy mala campaña electoral" y que hubo "cierta desmesura en los dos últimos años del gobierno de Aznar", ciertos "excesos verbales o de autoritarismo" que hicieron votar a parte de la izquierda que habitualmente no vota.
NACIONALISMO
Vázquez reconoció, por otro lado, que "suspiró" el día que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, pactó con el líder de CiU, Artur Mas, el texto del Estatuto de Cataluña, y no con ERC.
Sin embargo, advirtió de que "el nacionalismo moderado, al igual que el radical, nunca está satisfecho, siempre plantea nuevas metas, y nunca sabe hacia donde". "Es lo que a mi siempre me preocupa de estos acuerdos con los nacionalistas", prosiguió, preguntándose hasta cuándo durará el acuerdo. "¿Dentro de 20 años que nos van a decir?", se preguntó, aunque admitió que como socialista se siente "más cómodo" teniendo a CiU como socio que a ERC.
En la misma línea, admitió que "puede ser" que con su próxima marcha a la Embajada de España ante la Santa Sede "se hayan sentido aliviado algunos sectores de la política gallegas", especialmente el BNG, socio del PSOE en la Xunta, pero advirtió de que "un embajador no está mudo, un embajador habla y tiene que hablar de todo lo divino y lo humano y mucho más si está en el Vaticano".
"Yo represento a un sector importante del electorado socialista, y como socialista, los temas territoriales me vienen muy lejanos, yo miro más las cuestiones de valores, que son nuestra razón de ser", explicó. A su juicio, el presidente de la Xunta, el socialista Emilio Pérez Touriño, no es que no represente al electorado socialista, es que "tiene que torear con un socio de gobierno, que no es tarea fácil".