27-M.-Quintana asegura que el BNG tiene "abiertas de par en par" las puertas de Galicia para ser una "fuerza hegemónica"

A CORUÑA, 25 May. (EUROPA PRESS) -

El portavoz nacional del BNG y vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana, aseguró hoy que el BNG tiene ya "abiertas de par en par" las puertas de Galicia para convertir al nacionalismo en la "fuerza hegemónica" de la comunidad porque, según precisó, los gallegos ya no tienen la "imagen distorsionada ni caricaturizada" del Bloque.

"Ahora podemos convencer con argumentos a los gallegos para ser la fuerza política mayoritaria de Galicia y regir, así, los destinos de este país", dijo en un acto en A Coruña tras referirse a la experiencia de gobierno que le da al nacionalismo estar en la Xunta. De esta forma, y tras pasear por el mercado de A Guarda en compañía del candidato nacionalista en esta ciudad, Henrique Tello, y miembros de su candidatura, Quintana vaticinó unos "buenos resultados" electorales para su formación política el próximo domingo.

"Para muchos ciudadanos el BNG fue un descubrimiento porque tuvieron la oportunidad de comprobar lo que es el BNG y el nacionalismo; compromiso con la gente y con el país", precisó. Por ello, subrayó que tras el 27-M, el Bloque colocará a muchos ayuntamientos gallegos en la "misma longitud de onda" que la Xunta.

En un feudo de los socialistas, que según las encuestas pueden perder la mayoría absoluta, el líder nacionalista subrayó que A Coruña se juega "mucho" en estos comicios y auguró que, tras muchos años, el nacionalismo volverá al poder. En este sentido, precisó que, si algo quedó claro en esta campaña es que el PPdeG "no tiene nada que rascar" en la ciudad, mientras que el PSdeG "fracasó" en sus labores de gobierno.

No se consiguió que A Coruña tenga el protagonismo que tiene que tener en el ámbito metropolitano y nacional porque el proyecto estaba equivocado", dijo y criticó el "excesivo localismo" imprimido por los gobiernos de Francisco Vázquez y de Javier Losada. "Su política no trascendió del marco local y se cerró en sí misma y eso es lo que va a cambiar el BNG", aclaró.

También Tello se mostró "francamente emocionado" por los 15 días de campaña y señaló que llega a la recta final de estas elecciones con el ánimo "muy subido". Así, criticó la negativa de Losada a acudir a los debates y a enfrentarse "cara a cara" con los ciudadanos y animó a los coruñeses a "echarlo fuera de una vez". "Y esto es una muestra evidente de que estamos en el camino", dijo al referirse al caluroso recibimiento que tuvieron en el mercado.

"GUAPO, GUAPO"

Y es que, tanto él como Quintana y los miembros de la candidatura nacionalista, se dieron un baño de multitudes en el Mercado de A Guarda, especialmente, en la primera planta, donde se encuentran las pescaderas. Al grito de "guapo, guapo", fue recibido el líder nacionalista en varios puestos que no daba a basto para dar abrazos y apretones de manos.

"¿Pero quien es el famoso que va por ahí?", preguntó una anciana; "es el del Bloque, Quintana", respondió su hija. "Pues menuda está montando aquí", señaló sorprendida su madre. Y mientras el líder nacionalista pasaba al lado con una enorme sonrisa. "Venga aquí que sólo va por ese lado", gritaban desde el otro lado del mercado un grupo de pescadoras.

Pero antes de llegar, Quintana aún tuvo tiempo que lidiar con otras vendedoras que, sorprendidas por el gran número de personas, entre miembros de la candidatura y periodistas que allí había, expresaban sorprendidas; "¡pero que empacho de hombres!". "Si, señora, la verdad es que somos muchos", se disculpaba Quintana. "Pues venga, ánimo, y suerte", le deseó la mujer.

En el otro lado del mercado ya esperaban ansiosas otras tres pescaderas. "Pero que guapo es", el espetó una nada más llegar ante los coloretes del líder nacionalista. "Lo siento, Quique, pero es que él es muy guapo", se disculpaba otra con el candidato coruñés. La tercera prefería quedarse con Mario López Rico, uno de los dirigentes del Encontro Irmandiño de Beiras y miembro de la candidatura. "Es que más que guapo, es muy resultón", bromeó Quintana.

Más adelante le esperaban otras dos vendedoras que, ante la llegada de la comitiva nacionalista, no se cortaron un pelo para besar un cartel electoral que tenían de Tello. Tampoco se cortó Quintana en entrar en el puesto de venta y abrazar a ambas. "Pero como está este hombre", subrayó la más joven. "Pero no es el de la foto", dijo la mayor. "No mamá, este es Tello, el que vino es Quintana", resolvió.

Después, la comitiva nacionalista se dirigió a la segunda planta, la de carnes, donde el recibimiento no fue tan efusivo, y por último, a la tercera, la de la fruta. Donde volvió a recibir más gestos de cariño. "¿A donde va esta toda gente?", preguntaba nerviosa una niña a su madre. "Andan paseando", resolvió su madre.