El alcalde de Lugo advierte de que el botellón es "malo" y de que si se se sigue jugando con pólvora "puede estallar"

Actualizado: miércoles, 15 marzo 2006 15:07

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 15 Mar. (EUROPA PRESS) -

El alcalde de Lugo, Xosé Clemente López Orozco, advirtió hoy de que el botellón es un fenómeno social "malo" y "muy preocupante", y avisó a los colectivos políticos, sociales y educativos que hay que tomar medidas porque "estamos jugando con pólvora y, si no tenemos cuidado, la pólvora puede estallar".

En declaraciones a la Radio Galega, recogidas por Europa Press, Orozco abogó por poner en marcha iniciativas de tipo social, familiar, administrativo y educativo para paliar este problema, que se ha hecho más evidente en las últimas semanas con la celebración de varios 'macrobotellones' en diversas ciudades españolas.

El regidor lucense apostó por activar "medidas policiales", ya que una de las consecuencias del botellón son los destrozos que se producen en las ciudades. "Ni la menor sonrisa ante este fenómeno", enfatizó, antes de subrayar que ha sido uno de los primeros alcaldes en alertar de los peligros del botellón.

"No puede ser que ahora sonriamos y tengamos que lamentar el día de mañana personas que están alcoholizadas", explicó. Pese a que reconoció que no todos los jóvenes participan en este tipo de reuniones ni todos los que lo hacen se emborrachan, también recordó que "una parte sí".

Por otra parte, el alcalde de Lugo también se refirió a las próximas elecciones municipales, de las que dijo que "en absoluto" afectan a su gestión. "No me hace cambiar la agenda la proximidad de las elecciones", enfatizó, tras recordar que el período de campaña se limita a los 15 días anteriores a los comicios.

En ese sentido, consideró que los ciudadanos deciden su voto "día a día", por lo que los representantes políticos locales deben mantenerse "firmes" y trabajar por su ciudad "independientemente de si hay elecciones o no".

PLAN XERAL

Asimismo, el regidor socialista habló del futuro Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM), sobre el cual esperó que sirva para convertir a Lugo en "una ciudad de tipo medio", un modelo de población que "es el futuro dentro de Galicia y España y en el marco de la Unión Europea".

Insistió en que el plan debe recoger las dotaciones de zonas verdes, servicios sociales o residencias, y que se debe diseñar incluyendo la presencia de una "zona industrial potente". También destacó la importancia de las comunicaciones que permitan ir de un barrio a otro con comodidad y, en general, "que se vaya completando la ciudad".

De todas formas, enfatizó que el nuevo plan debe basarse en el consenso político y social, y otorgó gran importancia a la parte rural del Ayuntamiento de Lugo, "un 80 por ciento". "Es algo que tenemos que cuidar igual que cuidamos el casco histórico", advirtió. Finalmente, destacó estas áreas rurales por su contribución a la conservación de la naturaleza y a actividades económicas relacionadas con el turismo.