Trasladó los hechos a la Guardia Civil y está en marcha una investigación judicial
VIGO, 22 May. (EUROPA PRESS) -
Las alcaldesas de Mos , Nidia Arévalo (PPdeG), ha denunciado un supuesto delito de fraude y suplantación de identidad en relación con cobros del agua en su ayuntamiento, algo que ha atribuido a una "campaña sucia con nocturnidad y alevosía como nunca" para producir "un vuelco" en la noche electoral de este 26 de mayo.
Por ello, exige "que se esclarezca todo antes de las elecciones", según ha destacado este miércoles en rueda de prensa junto al gerente del Consorcio de Augas do Louro, Rufino Rodríguez --inicialmente estaba previsto que le acompañase también la regidora de O Porriño, que finalmente no ha acudido--.
Tras la denuncia interpuesta el pasado domingo ante la Guardia Civil, la regidora ha informado de que ya se ha abierto una investigación judicial a una empresa ficticia que ha distribuido recibos de agua "falsos".
Hace cinco años, el ayuntamiento delegó sus competencias en materia de agua en el Consorcio de Augas do Louro. Ahora, la primera edil denuncia un supuesto delito "de extrema gravedad", tras detectar el envío de cartas, que a día de hoy están "retenidas" (al menos unas 5.000) en la oficina de Correos.
Tras declaraciones de carteros de la oficina de Mos que ya tuvieron lugar el propio domingo y el lunes, el responsable de la misma declarará este jueves por la mañana, "y tiene que dar la luz que necesita la Guardia Civil".
En cualquier caso, Nidia Arévalo ha informado de que "hay una persona que entregó las cartas en la oficina de Mos", y que el pago correspondiente "fue abonado", y "hay cámaras" que lo grabaron. De ahí que confíe en que "esta semana quede aclarado".
Arévalo ha subrayado que el objetivo de su comparecencia es que cualquier vecino de Mos tenga esta información en caso de que le llegue el recibo en cuestión, que "es falso" y supone "suplantar la identidad del ayuntamiento de Mos, de la Xunta, de Augas y del Consorcio".
Dicho recibo reclama "un importe elevadísimo" y con ello, quien está detrás de esta operación, según la alcaldesa, "lo que se pretende es crear una alarma social y que los vecinos piensen que por ser usuarios de una traída privada van a tener que pagar importes superiores a 200, 300 y 400 euros".
"Acuamos no existe, esto es ficción. Esto va dirigido a las familias usuarias de traídas de aguas comunitarias, lo tan hablado los últimos meses. No es para los vecinos que tengan agua pública, es para los que tienen agua de una comunidad de usuarios", ha expuesto.
Exhibiendo la denuncia presentada ante la Guardia Civil, la regidora ha apuntado que este cuerpo contactó con Correos y se paralizó el envío de las cartas. "Están paralizadas esperando a que llegue el incautamiento por parte de la jueza que abrió investigación", ha dicho. "Lo que ocurre es que las cartas están llegando igualmente", según ha advertido.
En este contexto, ha lamentado que "la alarma social está creada" y se ha mostrado "indignada" porque no va "a permitir que se les mienta a los vecinos". "Es una campaña de acoso y derribo contra mí. Y conmigo que se metan todo lo que quieran", ha añadido, antes de resolver que lo que no admite es que ataquen a los vecinos.
Por eso, ha instado a las fuerzas y cuerpos del estado a hacer "lo que tengan que hacer, como si hay que detener a alguno". "En política no vale todo. En 30 años nunca pasó esto en este ayuntamiento. Es algo insólito", ha criticado, en un tiempo de campaña en el que ha subrayado que "las elecciones se ganan limpiamente y esto es lamentable".
"La guardia civil ya sabe de dónde salen estos recibos, y yo también, pero no lo puedo decir", ha concluido, al señalar que "las personas que hicieron este montaje se olvidaron de que aquí hay un código de barras (en el recibo) y la Guardia Civil ya sabe de quién son estos recibos", con "dos personas" detectadas.
