Anuncia una "reformulación" del dispositivo tras registrarse "errores" y "descoordinación"
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 1 Sep. (EUROPA PRESS) -
El conselleiro de Medio Rural, Alfredo Suárez Canal, reconoció hoy que el operativo de extinción de incendios de la Xunta fue "insuficiente" y "no estaba preparado" para una actividad incendiaria "excepcional e imprevisible" como a la que se tuvo que hacer frente entre el 4 y 15 de agosto, lo que motivó "seguramente" que se registrasen "errores y descoordinación". Por ello, admitió que él y su equipo pensó en la dimisión.
"Sí se nos pasó por la cabeza", reconoció sobre la posibilidad de dimitir durante su comparecencia a petición propia en la Comisión de Agricultura, después de que el diputado del PPdeG Roberto Castro le indicase irónicamente que creía que acudía al Parlamento a "despedirse" por su "brillantísima hoja de servicios". "Habrá que suponer, entonces, que la dignidad se la supone", le recriminó el popular.
No obstante, Suárez Canal le admitió que él y su equipo pensaron en "poner su cargo" a disposición del presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, una vez pasado el "momento de mayor crisis" de actividad incendiaria, en la que la "única preocupación" era la de hacer frente a las llamas.
No obstante, indicó que rechazaron esta posibilidad al llegar a la "conclusión" de que tenían la "conciencia tranquila" porque se actúo de la mejor forma posible ante una actividad incendiaria "imprevisible y excepcional" y porque su dimisión sería "premiar" a los "delincuentes" que pretendía con estos fuegos "subvertir a un Gobierno".
En esta línea, subrayó que la consellería fue consciente de que continúan muchos "delincuentes sueltos" y responsables de los fuegos "más importante". Por ello, él y su equipo reflexionaron cuál sería el "mensaje a transmitir" si un responsable político pusiese en ese momento su cargo a disposición.
"Le transmitiríamos a esos delincuentes que ese es el camino y que es es el itinerario a seguir cuando un quiere subvertir el Gobierno", aseveró Suárez Canal, quien por ello defendió la decisión del equipo de la Consellería de Medio Rural de "seguir trabajando por el país".
Una labor de la que destacó que, a pesar de "errores y disfunciones", hubo una respuesta "rápida" y "acelerada" en demanda de medios, al tiempo que recordó que hubo un contingente de operativos "que nunca se ha vivido en la historia de este país". "De los 300 incendios en día 10 pasamos a ninguno el día 15. Esto no ocurriría si no existiese un dispositivo potente", aseveró.
No obstante, atribuyó a la "novedosa y excepcional" tipología de la actividad incendiaria vivida --y que la hizo "imprevisible" por parte de la Consellería de Medio Rural-- que el operativo "no estuviese preparado" y fuese "insuficiente" para evitar que las llamas llegasen a núcleos de población y amenazasen propiedades y vidas humanas.
"Estaba preparado para hacer frente a incendios forestales convencionales", esgrimió Suárez Canal, quien precisó que finalmente a lo que tuvo que hacer frente el servicio de extinción fue a una tipología "excepcional" de fuegos pegados a casas con llamas que circulaban a "tres kilómetros por hora". Esto provocó un problema de seguridad ciudadana, que los obligó a realizar tareas de protección civil y "priorizar" esta defensa de vidas y propiedades por encima de la extinción de masa forestal.
EL OPERATIVO DE EXTINCION SE REFORMULARA
Una circunstancia que provocó, tal y como admitió, que "seguramente" se produjesen "errores, disfunciones y descoordinación" y que ha provocado, tal y como anunció, que el operativo de extinción de incendios vaya a ser "reformulado".
Suárez Canal anunció que esta "reformulación" del servicio de extinción se hará de "modo rápido", pero advirtió de que para ello será necesario un análisis "pormenorizado" de "incendio a incendio" y la "jerarquía de las decisiones" de la " para conocer lo que sucedió en cada caso.
No obstante, adelantó que se abogará por "optimizar" lo positivo del dispositivo y se "modificará" aquellas cuestiones que "sean necesarias para que no se vuelva a repetir una situación de este tipo".
LUGO Y OURENSE, NO TIPOLOGIA "EXCEPCIONAL"
Una situación "excepcional" que avaló por más de un centenar de incendios diarios durante los 12 días, con picos de 300 en alguna jornada; con fuegos con un media de cuatro o cinco focos; pegados a la población y en la franja costera Atlántica, lo que originó 1.059 niveles 1 de alerta; y donde hubo municipios que llegaron a "quintuplicar" su actividad incendiaria media con respecto a a otros años.
Frente a este panorama en las provincias de A Coruña y Pontevedra, Suárez Canal apuntó que las de Ourense y Lugo, no obstante, se salvaron de estas características y tipología de fuegos "excepcional", con una actividad incendiaria "similar" a la de otros años.
"TOMAR NOTA" y "MANO TENDIDA"
Tras 12 días con una "inusual" actividad incendiaria en "numero, intensidad y concentración" Suárez Canal consideró que el Gobierno gallego ha "tomado nota" y se mostró optimista de que esta "experiencia" será "importante" para "impedir" que vuela a repetirse una catástrofe de este tipo.
No obstante y, para ello, consideró necesario una serie de "pilares fundamentales" de acción de futuro --entre los que incluyó la reformulación del servicio de extinción-- y para cuya consecución "tendió la mano" a todos los grupos políticos a los que pidió la "colaboración".
Una petición de cooperación de todos los grupos que también extendió a la Comisión de Estudo de las causas y consecuencias de los incendios para que trabajen conjuntamente "sin prisa pero sin pausa"
Suárez Canal avanzó que estos "pilares" en los que trabajará el Gobierno gallego será la "persecución" de los "delincuentes incendiarios", ya que existe una cifra "pavorosa" de autores de fuegos sin detener; y la modificación de normativas para nuevas políticas de reforestación y ordenación de monte para que deje de ser un "auténtico polvorín".
APOYO DEL BNG Y PSDEG
Suárez Canal contó con el apoyo de los grupos parlamentarios del BNG y PSdeG en su análisis de una situación "excepcional e imprevisible", que no fue compartida por el PPdeG, que insistió en que otros años se habían producido el mismo número de incendios y atribuyó se quemaran más hectáreas este año "al descontrol e ineptitud" a la hora de coordinar el dispositivo de extinción.
Así, el diputado popular Roberto Castro calificó de "desastre, fiasco y barbaridad absoluta" la gestión que hizo la Consellería de Medio Rural de la crisis incendiaria.
CONSIGNA DE "CHAMUSCAR" A SUAREZ CANAL
En concreto, centró sus críticas en el director xeral de Montes, Alberte Blanco, quien consideró que ganó a pulso una "bofetada", aunque la "condescendencia" de Suárez Canal a la labor de éste hace, a su juicio, que sea el conselleiro "el mayor responsable del desastre por nombrar a un incapaz".
Asimismo, apuntó la existencia de una "lucha oculta" dentro del Gobierno bipartito con la intención de "chamuscar" al conselleiro de Medio Rural. "Esa era la consigna, que contó con alguna estocada del titular de Presidencia", aseveró Roberto Castro.
