Denuncia que "la austeridad de Feijóo sólo se aplica a los trabajadores" y pide medidas "realmente efectivas" contra la crisis
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 24 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Confederación Intersindical Galega (CIG) vio hoy "inadmisible que se esté hablando de congelar los salarios de personal de la Xunta de Galicia", ya que aseguró que estos trabajadores llevan "muchos años de pérdida adquisitiva" y, además, "más de la mitad" tienen unos ingresos que no superan los 954 euros al mes.
En un comunicado de prensa, el secretario nacional de la CIG-Autonómica, Manuel Gallardo, denunció que "es inmoral que los privilegiados sigan estando excesivamente retribuidos y que intenten reducir el déficit de las arcas públicas a cuenta de los salarios más bajos de la Administración".
De esta forma, criticó las declaraciones de la responsable de la Consellería de Traballo, Beatriz Mato, quien entendió que esta medida "no estaría fuera de lugar" en el contexto de crisis económica y aludió a la "solidaridad" de los funcionarios. Respondía, así, al anuncio del ministro de Fomento, José Blanco, sobre la posibilidad de que el Ejecutivo central adopte esta decisión.
"Congelan el salario de los trabajadores públicos pero mantienen el plus de los altos cargos", añadió, crítica a la que sumó los "gastos a placer" de los parlamentarios, sus "altos" salarios y sus "pases vip". "Entretanto, al personal laboral y funcionario aún no le pagaron el fondo de acción social del año pasado", aseveró.
MEDIDAS "REALMENTE EFECTIVAS"
Para Gallardo, "la austeridad del gobierno Feijóo sólo se aplica a los trabajadores, de ahí el contrato millonario con Microsoft o los 4 millones que se gastan en subvencionar colegios del lobby de la Iglesia", dedujo.
Por otra parte, también criticó a sindicatos como CC.OO., CSIF y UGT --que negociaron subidas porcentuales de los sueldos en Madrid--, por "limitarse ahora" a decir que la congelación de los sueldos es "normal" debido a la crisis.
Por todo ello, instó al Gobierno gallego a "reconsiderar la situación", y le urgió a tomar medidas "realmente efectivas" contra la crisis, "no sólo medidas populares para lavar la cara y justificar su austeridad".
