Garantiza que Ciudadanos "no" tiene un socio de gobierno natural y que "no" pactará "por sillones", sino "propuestas concretas"
Reivindica su formación como "un nuevo proyecto de centro sensato con las manos limpias" y rechaza cábalas electorales para la provincia
OURENSE, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
La cabeza de cartel de Ciudadanos (C's) al Congreso por Ourense, Fátima Balsa, critica el "abandono de la clase política" a su provincia y tiene claro que, si sale elegida, "lo primero que pedirá", a corto plazo, es "la finalización de las obras licitadas del AVE a Galicia", pese a que las formaciones gallegas rivales afean al partido de Albert Rivera que siembre "dudas" sobre esta infraestructura.
A largo plazo, propondrá la elaboración de un plan estratégico para el desarrollo de "sectores clave". Entre ellos, en un cuestionario respondido por escrito a Europa Press, ha incluido "el turismo rural, con el termalismo y el arte como ejes centrales". También ha aludido a potenciar la agricultura y ganadería ecológicas; así como el sector tecnológico con centros especializados y el desarrollo de las empresas.
A esto ha añadido el impulso de nuevas políticas estatales de apoyo a los emprendedores y la "simplificación" de la administración. Y es que, a su juicio, Ourense es una provincia que sufre "el abandono" de la clase política y, de ahí, que los jóvenes "no vean futuro" y se vean obligados a marcharse a otras zonas de España o al extranjero.
Sobre qué motivos le llevan a dar el paso de entrar en política activa en un momento en el que esta actividad está tan denostada, ha replicado que "precisamente" porque es necesario dar "soluciones" a una sociedad afectada por "la burbuja, la cultura del pelotazo, los chanchullos y los enchufes", que han dejado una España "que no está preparada para competir en el mundo de la globalización".
"Necesitamos respuestas, respuestas inmediatas a las enormes injusticias sociales que han dejado paro, precariedad, pobreza y endeudamiento. Habrá que hacer algo", ha sentenciado.
"MANOS LIMPIAS"
Balsa está animada en lo que respecta a expectativas electorales, pese a concurrir en una provincia en la que hasta ahora ha predominado el apoyo al PP. "Somos un partido político del siglo XXI formado por ciudadanos decididos a transformar España", se ha reivindicado.
A renglón seguido, ha esgrimido que los españoles, los gallegos y también los ourensanos podrán elegir "entre una vieja izquierda sin proyecto, una vieja derecha con un proyecto obsoleto o un nuevo proyecto de centro sensato, con las manos limpias y para todos".
Con todo, preguntada acerca de si aspira a arrebatar al menos un escaño al PP, ha evitado concretar un objetivo y ha señalado que "los ciudadanos decidirán el 20 de diciembre".
Sobre si le pasará factura al PP que su presidente provincial en Ourense, José Manuel Baltar, haya sido acusado por una mujer de ofrecerle un puesto de trabajo a cambio de sexo, ha replicado que su conducta es "cuando menos reprochable en el aspecto político".
"Ciudadanos está en contra de la violencia machista y consideramos que debemos de empezar educando en valores desde los cero años a nuestros hijos", ha aseverado, mientras que, desde una perspectiva más global sobre los vínculos entre las sospechas de corrupción y los partidos, ha apuntado que C's lleva "específicamente" en su programa "que los imputados queden fuera de las listas electorales".
"NO PACTAREMOS POR SILLONES"
Acerca de cuál es el socio de gobierno natural de Ciudadanos, la candidata ha respondido que "ninguno". "No tenemos socios de gobierno; no pactaremos por sillones, sino propuestas concretas", ha señalado, para añadir que ella, como concepto político, entiende que Galicia es "una comunidad autónoma dentro de España", tal y como la "define la Constitución".
No obstante, ha reconocido que "hay otros que la definen como nación" y ha aludido a la "nazón de Breogán" que "consta en el himno gallego", y "otros como país", minimizando la relevancia de los términos que se utilicen para darle nombre. "Lo que interesa es que todos los gallegos estemos orgullosos de Galicia, y podamos tener unos servicios sociales, sanitarios y de desarrollo económico que nos merecemos", ha contrapuesto.
Todo ello, eso sí, "partiendo del principio de que España es un país que pertenece a todos los españoles" y de que "todos los españoles son iguales" por lo que, ha abogado, "hay que acabar con ciertos privilegios".
