Condenado a siete años de cárcel un hombre que violó a la anciana que lo acogió en su casa

   PONTEVEDRA, 5 Jul. (EUROPA PRESS) -

   La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra ha condenado a siete años de cárcel a un hombre de 55 años que, en enero de 2020, violó a una mujer de 75 años que por caridad lo tenía acogido en su vivienda.

   El tribunal lo ha considerado autor de un delito de abuso sexual con penetración, agravado por razón de convivencia.

   En la sentencia, las magistradas de la sección cuarta entienden que durante el juicio ha quedado probado que el acusado, en la noche del 30 de enero de 2020, aprovechándose de la situación de convivencia y siendo consciente de la importante diferencia de edad entre ambos y de la delgadez que presentaba aquella por desnutrición, se dirigió al dormitorio de la mujer y la violó.

   La víctima había sufrido tiempo antes un derrame cerebral, estaba muy delgada, presentaba signos de desnutrición y tenía un deterioro cognitivo leve.

   La denunciante falleció por causas ajenas a estos hechos, en junio de 2022, pero su declaración prestada durante la fase de instrucción de esta causa se reprodujo durante la vista oral.

   El fallo judicial recoge que en el testimonio sobre la agresión sexual en contra de su voluntad, la víctima se mantuvo "firme, clara y sin contradicción". Además, llama la atención sobre la frase que, según relata le dijo el encausado: "Vamos a hacer una cosita muy rica", que la mujer refirió tanto a la Guardia Civil como a las testigos las que le contó lo que le había sucedido, en particular, a la Trabajadora Social".

   Además la Guardia Civil de Cambados recogió una sábana, una manta y una funda de almohada de la habitación de la víctima en la que apareció semen del acusado.

   La sentencia destaca que todo el acervo probatorio corrobora el testimonio ofrecido en su día por la víctima y subraya que, "frente a toda la prueba expuesta, el encausado se limitó a negar los hechos".

   Además de la condena de siete años de prisión se impone la medida de libertad vigilada, que se ejecutará con posterioridad a la pena privativa de libertad, por un periodo de cinco años.