SANTIAGO DE COMPOSTELA, 14 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, garantizó hoy a las empresas ubicadas en la costa pendientes de la renovación de la concesión por parte del Ministerio de Medio Ambiente que la solución se adoptará "de mutuo acuerdo" para garantizar que la preservación del litoral que promueve el Gobierno "salvaguarda" la actividad económica y el empleo.
En consecuencia, en la rueda de prensa posterior al Consello, Touriño apeló a "no crear alarma" por la revocación de las licencias promovida por el departamento estatal, puesto que la recuperación del dominio público marítimo terrestre, competencia de la Dirección General de Costas, responde a un "criterio general" de protección que, no obstante, tiene en cuenta que "hay realidades empresariales de alto valor para la economía de un país".
El mandatario recordó que, en el caso de Galicia, la acuicultura representa un sector estratégico y, por ello, aseguró que la compañía noruega Stolt Sea Farm, que posee dos plantas en Carnota y Muxía (A Coruña) con la concesión a punto de vencer, puede tener la "tranquilidad absoluta de que trabajará conjuntamente" con el ministerio y la Xunta para "diagnosticar todas las posibilidades", incluida la del traslado.
No obstante, subrayó que todos los antecedentes que han tenido lugar hasta ahora se han saldado "de mutuo acuerdo" por las partes y, en consecuencia, garantizó que "en ningún caso" se trata de un "rescate obligatorio de la concesión, sino de una medida de inteligencia política desde el punto de vista económico y ambiental".
DECISIONES EN POSITIVO
Según él, estas decisiones son "en positivo, puesto que sólo se procede a ellas desde el mutuo acuerdo" de los implicados y el "interés por encontrar una ubicación alternativa". Por ello, informó de que la Consellería de Pesca ya se ha puesto en contacto con la multinacional nórdica y con la Dirección General de Costas con el propósito de "ver qué hacer" para combinar "la sensibilidad ambiental con el mantenimiento de la actividad económica y del empleo".
Por tanto, el presidente subrayó que "no hay presión, ni alarma, ni amenaza, sino una política que se llama diálogo" en la que el bipartito se mostrará "desde el principio partidario del mantenimiento de la actividad económica y empresarial y, a partir de ahí, buscar solusiones".
Así, reconoció que la implantación de la acuicultura en Galicia es "positiva" y, en consecuencia, aseveró que "se debe salvaguardar". "Otra ubicación es una posibilidad, pero siempre deberá tenerse en cuenta el interés prioritario de salvaguardar la actividad económica y el empleo", concluyó.