Convención PP.- Quintana asegura que el PPdeG certificó "oficialmente" que es "un partido inútil para Galicia"

SANTIAGO DE COMPOSTELA 6 Mar. (EUROPA PRESS) -

El vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana, aseguró hoy que la convención que los populares celebraron el pasado fin de semana en Madrid certificó "oficialmente" que el PPdeG es "un partido inútil para Galicia", puesto que "quedó evidente que ni pincha ni corta" en la definición de las políticas del partido a nivel estatal.

En una rueda de prensa para informar de las negociaciones sobre el traspaso de las competencias pendientes con el Gobierno, Quintana lamentó que en los tres días que duró el cónclave "se hablase 3.000 veces de Cataluña, 3.500 de Euskadi y de Galicia, ni una sola palabra".

Además, consideró que el presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, "se convirtió en un alumno aplicado de Acebes y Zaplana" y añadió que el del pasado fin de semana fue un "triste final" para el PPdeG, puesto que "nunca pinchó tan poco en la política estatal".

En consecuencia, declaró que los conservadores "ya no son una opción válida para la defensa de los intereses de los gallegos" y se mostró convencido de que, tras la convención, ésta es "una afirmación que millares de gallegos que votaron al PP aceptan y practican".

DEMOSTRAR EL GALLEGUISMO

Según él, el PPdeG "perdió una ocasión de oro para demostrar con hechos el galleguismo que predicó en su congreso", al tiempo que advirtió de que "teme" que los postulados apuntados por los populares en esta cita "sirvan para reforzar esa tesis de obstáculo continuo que se ponen al desarrollo del autogobierno de Galicia".

Por ello, el número dos de la Xunta no consideró el abandono del galleguismo "una buena noticia, ni para el PP ni para Galicia", puesto que la nueva apuesta podría "dotar más de contenido esa idea que el PPdeG siembra para dar una espantada a lo que hoy es una reivindicación mayoritaria en Galicia: que pueda mejorar su autogobierno".

Por lo que respecta a la convención en su conjunto, Quintana la definió irónicamente como "regreso al pasado II" ya que, a su juicio, "pocas veces se puede hacer una convención en la que el contenido esté tan distante del titular que anunció". "Se anunciaba una convención con una vista puesta en el futuro, que tiene un resultado con la vista sólo puesta en el pasado", concluyó.