Creyentes gallegos critican que la jerarquía de la Iglesia "se alíe" con los partidos y defienden una sociedad laica

Actualizado: martes, 3 enero 2006 15:07

Opinan que el Gobierno "cumple su misión" al atender demandas de la sociedad y que la Iglesia debe identificarse con el mensaje de Jesús

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 3 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Coordinadora de Crentes Galegos, que representan a más de 20 asociaciones, publicaciones, grupos, comunidades y personas individuales de la Iglesia de base de Galicia, recriminó hoy a la jerarquía eclesiástica que "se alíe" con los partidos políticos y encargue a los Gobiernos su función de "hacer católicos". Este colectivo defiende una sociedad laica que se movilice con el objetivo de la paz.

Antón M. Aneiros, Carmela Capeáns, Agustín Bueno y José María Barca actuaron hoy de portavoces de la Coordinadora de Crentes Galegos, en un acto en Santiago de Compostela en el que presentaron un 'Manifiesto por la Paz' que proponen para "una reflexión" en contra de la violencia y de las guerras. Apuestan por un plante de los ciudadanos para que "nieguen su voto" a aquellos partidos que no se comprometan con la paz.

"Necesitamos una sociedad civil, laica, abierta y capaz de comprender la pluralidad de pensamiento, de credos, de opciones e iniciativas en las que muchos --diferentes-- podamos participar en pie de igualdad", señala el manifiesto.

José María Barca, integrante del colectivo Somos Iglesia e integrado en la Coordinadora, señaló que piden paz a los ciudadanos y a la Iglesia. Añadió que los ciudadanos "se siente incómodos" con la jerarquía eclesiástica y expresó que muchos están "en contra de posturas antitolerantes" como la mantenida por la Conferencia Episcopal Española contra los matrimonios entre homosexuales o la relaciones con el Estado, entre otras cuestiones.

INDEPENDENCIA

El portavoz de la Coordinadora de Crentes Galegos, Antón M. Aneiros, defendió la necesidad de "una sociedad laica" vinculada a la "independencia" de los poderes políticos y señaló que Estado e Iglesia deberían ser "absolutamente independientes uno del otro".

Añadió que, en cuestiones como el conflicto en la reforma educativa y sobre la asignatura de Religión, "la Iglesia quiere encomendar al Estado que domestique a la gente y que haga católicos, cuando esta no es su función". "Los gobernantes no tienen la misión de hacer cristianos o católicos, sino de gobernar en paz, de establecer unos mínimos y legislar para el común de la población", puntualizó.

Según dijo, el Gobierno "cumple su misión" al atender las demandas de la sociedad en cuestiones como el aborto, la eutanasia y los matrimonios gays y "la Iglesia no tiene derecho a hacer lo que hace, recurriendo a las manifestaciones públicas". "Debe volver a nacer una Iglesia identificada con el mensaje de Jesús", concluyó.

"NO ALIARSE"

Carmela Capeáns, de la comunidad de la Iglesia de base de Santiago, puntualizó que políticamente toda persona trabaja con sus ideas, pero "la jerarquía eclesiástica no se puede aliar con un partido". "No puede ir a una manifestación con el PP, ni con el PSOE ni con el BNG, sino que puede ir cuando quiere defender a la gente", aseveró.

Agustín Bueno, integrante de la Coordinadora, puntualizó que "una cosa es la Iglesia y otra su jerarquía". Aseguró que las ideas expuestas hoy son compartidas por la gente de barrio y reconoció que "cada vez más" los ciudadanos están separados de la jerarquía de la Iglesia.

Toda esta situación está relacionada, según la Coordinadora de Crentes Galegos, con la falta de respeto a la vida humana, los malos tratos y la muerte como destrucción, que caracteriza a la sociedad actual en todo el mundo. Este colectivo de creyentes admite que la situación "es muy compleja" y que el objetivo "no es dar lecciones, sino sembrar esperanza" y provocar una reflexión para avanzar hacia la paz.

NEGAR EL VOTO

Los miembros de esta coordinadora expusieron que detrás de los distintos tipos violencia y de las guerras hay "intereses varios" y que la "injusticia" es el "caldo de cultivo" para el "terror". Recriminaron que los gobiernos deciden empezar guerras, sustentadas en "mentiras" y "no se pide responsabilidades" a los políticos, como ocurrió con la Guerra de Irak.

Además de apelar a la responsabilidad de los gobiernos para avanzar en favor de la paz, esta coordinadora también recordó el papel que deben jugar también los medios de comunicación para difundir este mensaje. No obstante, reconocieron que "el camino real para la paz es que los ciudadanos digan hasta aquí llegamos" y "nieguen el voto" a aquellos partidos que no se comprometan con este objetivo.