Cruz Roja considera un "golpe" la muerte de dos indigentes en Ourense porque demuestra "la situación en la que viven"

OURENSE 11 Ene. (EUROPA PRESS) -

Cruz Roja considera "un golpe" la muerte de dos indigentes en la ciudad de Ourense porque pone de manifiesto "la situación en la que viven". Más de 40 mendigos están asentados de forma permanente en las calles de la ciudad de As Burgas, que están localizados en una decena de puntos donde las personas sin techo buscan rincones para dormir.

Generalmente frecuentan algunas plazas del casco histórico, las estaciones de ferrocarril y autobús y cajeros automáticos. Cruz Rojas en Ourense desarrolla desde el año 2002 un programa de atención a indigentes donde el pasado año atendió a más de 100 personas.

El responsable de este programa 'Sin techo' de Cruz Roja, Diego Conde, aseguró que los dos mendigos fallecidos el pasado domingo en una vivienda abandonada en la ciudad de Ourense "no eran usuarios de este servicio", pero "supuso un golpe" porque demuestra "la situación que estaban viviendo" y lo mal que lo pasan.

Voluntarios de Cruz Roja saldrán a la calle por la noche para intentar ayudar a las personas sin techo con la intención de darles algo caliente y ofrecerles la posibilidad de dormir en el albergue y evitar las bajas temperaturas.

Diego Conde manifestó que intentarán "salidas nocturnas una vez a la semana pero depende de la posibilidad de los voluntarios". El coordinador del programa coincide con el concejal de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Ourense, Francisco Muñoz Seguín, es que es muy difícil evitar la muerte de los indigentes porque "quieren estar a su aire".

Según los datos de Cruz Roja en Ourense, los indigentes "suelen tener entre 30 y 45 años de edad", por lo que "la población es bastante más joven de lo que parece", pero "te encuentras con cualquier tipo de persona con desarraigo familiar y con pérdidas de pautas de socialización".