La orden franciscana se ha comprometido, si sale de prisión, a alojarlo en un convento, pero no podrá desarrollar labor pastoral
LUGO, 4 Mar. (EUROPA PRESS) -
La defensa del religioso detenido la semana pasada en la zona de O Cebreiro (Lugo) ha presentado este miércoles el recurso contra el auto de prisión provisional por el que el franciscano permanece en la cárcel luguesa de Bonxe, alegando en que, en estos momentos, "todo son indicios" y, a su juicio, "no hay cargos contra él".
Así lo ha manifestado, en declaraciones a Europa Press, el letrado Manuel Bermúdez, que ha explicado en que el franciscano está acusado en base "a habladurías", a la espera de que declaren en el juzgado las supuestas víctimas, ha precisado, para lo que no se ha señalado fecha, según ha agregado. "Indicios directos no tenemos", ha apostillado.
En este sentido, ha argumentado en su recurso que a día de hoy "no hay indicios realmente de ningún comportamiento delictivo". En concreto, sobre el delito relativo a la prostitución que se le ha imputado a su cliente, que residía en la comunidad franciscana de Pedrafita do Cebreiro hasta su arresto, ha insistido en que si bien reconoce que mantuvo relaciones sexuales con la chica de 17 años, ha insistido en que fueron consentidas y no le dio dinero a cambio.
Al respecto, ha reiterado que sí le dio dinero pero en el marco de su labor de franciscano de "ayuda a los necesitados", ha esgrimido el abogado, por lo que ha pedido que se le deje en libertad, como solicitó cuando pasó a disposición del juzgado de Becerreá, en el que ha presentado el recurso, que será pasado a Fiscalía y elevado a la Audiencia Provincial de Lugo.
Bermúdez ha recalcado que "no hay cargos contra él en este momento" y, sobre las fotografías con la menor halladas en un dispositivo intervenido al franciscano, ha subrayado que "no hay nada en las diligencias que haga ver que fueron reenviadas". "Me ciño a lo que hay en las diligencias. Podría estar en libertad sin cargos", ha defendido.
ORDEN
Sobre la posibilidad de alojamiento fuera de la prisión, la defensa del franciscano ha explicado que la orden a la que pertenece se ha comprometido a que, si queda en libertad, pueda ir "a algún convento, sin perjuicio de lo que dictamine el código canónico".
Al respecto, ha recordado que el religioso ha sido apartado de cualquier trabajo pastoral, por lo que si retorna a algún convento "no desarrollará actividad pastoral ni otra en la que pudiera tener contacto con menores de edad dados los cargos que se le imputan".
En concreto, el Obispado de Lugo le ha prohibido de manera cautelar su presencia en las parroquias de la unidad pastoral de O Cebreiro, así como cualquier otro tipo de colaboración pastoral en el territorio diocesano.
Fue el pasado lunes 23 de febrero, tras la denuncia de un particular, cuando se produjo el arresto por parte de agentes de la Guardia Civil, que intervinieron al religioso dispositivos electrónicos, móviles y ordenador, en los que se descubrieron archivos multimedia, entre los que se incluyen imágenes en las que aparece el religioso con una menor manteniendo relaciones sexuales.
Tras pasar a disposición judicial, el juzgado de Becerreá había decretado prisión comunicada y sin fianza por abusos sexuales y delito relativo a la prostitución para el religioso.
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