Detenidos tres jóvenes en A Coruña tras darse a la fuga en un vehículo después de saltarse un semáforo en rojo

A CORUÑA, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -

Agentes de la Policía Local de A Coruña detuvieron este viernes a tres jóvenes tras darse a la fuga en un vehículo después de saltarse un semáforo en rojo.

Según explican fuentes municipales, sobre las 6.00 horas de este viernes en la confluencia de la carretera de Baños de Arteixo con la Tercera Ronda varias dotaciones policiales procedieron a la detención de tres jóvenes, dos de ellos por los delitos de resistencia y desobediencia a agentes de la autoridad, y un tercero, además de por el delito de desobediencia y de resistencia a agentes de la autoridad, por otro contra la seguridad vial.

La actuación policial se inició en la calle Teresa Herrera con calle Betanzos, cuando uno de los detenidos, conductor de un vehículo, junto con otros dos acompañantes, no respetó la luz roja del semáforo existente en la confluencia de las citadas calles y, tras darle el alto una dotación policial en un vehículo sin distintivos policiales, emprendió la fuga a gran velocidad.

Primero el vehículo circuló por la Plaza de Lugo hacia la Plaza de Ourense, sin respetar la luz roja del semáforo de la citada plaza con la calle Fontán. Después giró hacia la Avenida Linares Rivas, accediendo a la Avenida de Alfonso Molina alcanzando velocidades de 130 kilómetros por hora y a la altura de la Ronda de Estaciones hizo un "giro brusco", según precisa la Policía, a la derecha para acceder a la citada calle dirección a la Ronda de Outeiro.

A continuación giró a la derecha por la calle Ángel del Castillo, donde a punto estuvo de atropellar a un peatón que caminaba por la calle Ángel Senra, giró a la derecha por la calle Alcalde Pérez Porto, donde casi atropelló a unas personas que se apeaban de un taxi.

Después giró hacia la calle Menéndez Pidal, para acceder a la Ronda de Outeiro, cambió de sentido de circulación a la altura de la Avenida de A Sardiñeira y accedió a la Avenida Joaquín Planelles Riera, donde a la altura de la empresa Conde Medín rebasó a una velocidad superior a los 100 kilómetros por hora a un vehículo parado en el carril del mismo sentido de circulación, por lo que tuvo que invadir el carril del sentido contrario, lo que obligó a detener a un turismo que circulaba por el citado carril.

Al final de esta vía giró a la derecha hacia la glorieta de Eduardo Diz López, continuó hacia la calle Severo Ochoa al girar en la izquierda en la glorieta de la calle Newton, tomando ésta por el sentido contrario de circulación en donde unos metros más adelante se encontró con un vehículo patrulla con distintivos con las luces y sirenas activadas que tuvo que echarse a un lado para no colisionar frontalmente contra él.

INTERCEPTADO

Posteriormente, se fue a la derecha en la carretera de Baños de Arteixo y a la altura del enlace con la carretera C-552 y A-55, el vehículo que había iniciado la persecución consiguió alcanzarlo y entorpecer su circulación hasta que se detuvo.

En ese momento los componentes de otra dotación se apearon del vehículo policial y, al acercarse al vehículo perseguido, el conductor hizo ademán de emprender nuevamente la marcha, por lo que los agentes abrieron la puerta del vehículo y lo sacaron a la fuerza al ofrecer "gran resistencia y desobediencia agarrándose al volante de su vehículo", matiza la Policía.

Por su parte, los otros dos acompañantes intentaron huir cuando el coche se detuvo siendo interceptados por una tercera dotación policial. Estos ofrecieron una "fuerte resistencia" al ser detenidos, e intentaron continuar la huida a pie, siendo identificados como J.A.R.N., de 22 años, y D.F.E., de 30 años.

El conductor del vehículo, detenido por un delito contra la seguridad vial así como del delito de resistencia y desobediencia a agentes de la autoridad, fue identificado como M.R.O., de 24 años de edad, que en la prueba de detección alcohólica que se le realizó arrojó un resultado positivo de 0,34 miligramos por litro de aire expirado.

La Policía Local indicó que el conductor durante la persecución condujo "a gran velocidad", derrapando el vehículo en las curvas y "con un total desprecio hacia la vida de los demás usuarios de la vía y las propias de los ocupantes del vehículo".