España obtiene 95 licencias de barcos para faenar en las aguas de Marruecos

Actualizado: viernes, 7 abril 2006 17:00

El Gobierno se opone a que el acuerdo de pesca incluya una declaración sobre el Sáhara Occidental

BRUSELAS, 7 Abr. (EUROPA PRESS) -

España obtuvo hoy 95 de las 119 licencias de barcos que se incluyen en el acuerdo de pesca entre la UE y Marruecos después del reparto de naves que acordaron en Bruselas los representantes de los Estados miembros para un pacto que se espera pueda entrar en vigor definitivamente el próximo 1 de junio de 2006.

Fuentes del Consejo de la UE indicaron que en la reunión de este viernes España no vio modificada la cantidad de licencias que se le atribuyó el pasado mes de julio, cuando los negociadores de la Comisión Europea y de Marruecos llegaron a un acuerdo, y que representantes del Ministerio de Agricultura y Pesca cuantifican en 95 barcos.

Por otra parte, los representantes de los Estados miembros acordaron también el reparto de las posibilidades de pesca industrial para las especies pelágicas, que se establece en función de las toneladas y para las que el acuerdo fijó una cantidad total de 6.000 toneladas.

España, Francia y Portugal podrán pescar 1.333 toneladas de estas especies cada uno; Alemania, 48.500 toneladas; Letonia, 11.155; Lituania, 13.095; los Países Bajos, 19.400; Irlanda, 7.500; y Polonia y el Reino Unido, 2.500 toneladas cada uno.

No obstante, el acuerdo incluye una "declaración sobre las posibilidades de pesca", donde se recoge de manera expresa la determinación de la Comisión de tratar de incrementar la cantidad de 6.000 toneladas en posteriores negociaciones con Marruecos.

El Ejecutivo comunitario advierte de que la revisión se podría llevar a cabo en función de la evolución de las reservas de estas especies en los caladeros marroquíes y que el reparto que se fijó hoy sobre la cantidad disponible actualmente "no constituye un precedente" de futuras eventuales distribuciones.

Estos son los términos definitivos del acuerdo pesquero que todavía tiene que concluir el proceso de ratificación tanto en la UE como en Marruecos, pero que se espera que, tras un retraso que le impidió entrar en vigor en la fecha prevista, el 1 de marzo, esté operativo a partir del próximo 1 de junio.

Por lo que respecta a la ratificación en Europa, las fuentes comunitarias indicaron que en la reunión de este viernes se alcanzó una mayoría cualificada para aprobar el acuerdo. Así, se espera que los ministros europeos de Agricultura y Pesca puedan darle el respaldo definitivo en el Consejo del 22 y 23 de mayo, después de que también haya sido refrendado por el Parlamento Europeo, en el Pleno del 15 al 18 de ese mismo mes.

SÁHARA OCCIDENTAL

El punto sobre el que hoy no se logró un acuerdo es el relativo al deseo de algunos Estados miembros de incluir en el acuerdo una declaración relativa al Sáhara Occidental y a que el acuerdo pesquero incluye un territorio que es motivo de conflicto entre el Frente Polisario y Marruecos desde hace 30 años.

Suecia lidera el grupo de países -también Chipre, Francia, Irlanda y los Países Bajos- que pretende introducir una mención al respeto del derecho internacional, que dispone que no se deben tocar los recursos naturales del Sáhara Occidental hasta que no haya una solución definitiva al conflicto por su soberanía.

A pesar de que los servicios jurídicos de la Comisión Europea y del Consejo de la UE aseguraron que el acuerdo pesquero está en línea con el derecho internacional, estos países pretenden incluir una declaración adicional. Las fuentes comunitarias indicaron que durante la próxima reunión de representantes de los Estados miembros se discutirá sobre la posibilidad de que este tema sea debatido en una reunión posterior en mayo previa al Consejo de ministros.

Agregaron además que España es uno de los países más contrarios a mencionar la cuestión del Sáhara Occidental en el acuerdo, junto a otros como Francia, Portugal y Dinamarca.

Según las fuentes, estos países consideran que la declaración sería "inoportuna" y que el acuerdo de pesca no es el contexto adecuado para discutir sobre este asunto, sino en Naciones Unidas, y recuerdan que el trato incluye una asociación entre la UE y Marruecos del que se beneficiarán las poblaciones. Por último, alegan que la mención al Sáhara Occidental podría dificultar el proceso de ratificación que se desarrolla paralelamente en el Parlamento marroquí.